TW
0
EUROPA PRESS-VITORIA El lehendakari, Juan José Ibarretxe, afirmó ayer que la consulta se llegará a celebrar «pese a los límites de la alambrada» que PSOE y PP han puesto a través del Tribunal Constitucional. Tras calificar de «pírrica victoria» la del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, al «imponer» la suspensión de la Ley de Consulta, aseguró que los vascos reclamarán en Europa el derecho a decidir porque el Estado español «está violando el Convenio Europeo de Derechos Humanos».

Durante su intervención en el último pleno de política general de esta legislatura, el lehendakari aseguró que los miembros del Gobierno vasco, «a título personal, junto con otros miles y miles de ciudadanos vascos, van a alzar su voz en Europa con el objetivo de restituir el derecho de opinión y participación política, que injusta e incomprensiblemente ha sido suspendido».

«Si una simple consulta puede poner en riesgo nada más y nada menos que la sacrosanta soberanía de la nación española, es que realmente la nación española es muy endeble», aseveró.

Tras señalar que sólo podrá existir «una relación de convivencia libre entre el pueblo vasco y el pueblo español», si a los vascos se les permite expresar su opinión al respecto, Ibarretxe aseguró que la decisión del TC es «un ataque frontal al autogobierno político», por lo que apostó «por una respuesta serena y pacífica, pero también firme y contundente». En este sentido, destacó que la sociedad «le ha quitado a ETA la llave y el protagonismo» porque «ETA jamás decidirá el futuro de la sociedad vasca».

El lehendakari se congratuló de haber situado «en el centro del debate político el derecho a decidir». «No se puede utilizar permanentemente el recurso a los tribunales como alambrada para prohibir el derecho de los ciudadanos vascos a ser consultados», advirtió Ibarretxe.

El lehendakari aseveró que «el futuro de Euskadi no se puede decidir en una negociación entre el Gobierno español y ETA», porque la sociedad vasca «no necesita la tutela ni tampoco las imposiciones de nadie». Tras afirmar que «no divide quien consulta, sino quien prohíbe consultar», explicó que, «frente al muro del 'No'», él ha liderado «la iniciativa política para evitar caer de nuevo en la espiral de la violencia y del no-diálogo».A su juicio, de esta forma, se impone que «sólo existe una nación, la nación española, que sólo existe un pueblo soberano, el pueblo español, y que el pueblo vasco no existe y no tiene derecho a decidir». «En definitiva, argumentos que me recuerdan a los de la España imperial, 'una, grande y libre', que esgrimió la dictadura franquista. Hoy, como entonces, el pueblo vasco no se resigna», apuntó. En esta línea, apuntó que «facilitar las consultas populares es el futuro, prohibirlas es el pasado».