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El portavoz parlamentario de CiU en el Congreso, Josep Antoni Duran i Lleida, reprochó hoy al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que no estar «a la altura» de las responsabilidades que los ciudadanos le han encomendado y le advirtió de que puede «perder otro año» a la hora de impulsar las reformas necesarias de la economía española, para lo que requiere una «política coherente y sustentada con una mayoría parlamentaria estable».

«Si no es capaz de buscar y encontrar alianzas sólidas, lo más sensato será iniciar el ciclo electoral una vez finalizadas las reformas actualmente en trámite parlamentario», como la laboral y la de la Ley de Cajas, incidió el dirigente catalán. «El ir tirando no da para más, se acabó», remachó.

Durante su intervención en el Debate del estado de la Nación, el diputado catalán aseguró que su censura no es «nada personal» y no supone «intención alguna» de apoyar una eventual moción de censura del PP. «Falta de confianza respecto a unos y respecto a otros», advirtió.

No obstante, en su segundo turno de intervención, el diputado catalán se mostró más comedido en sus críticas y aseguró que sus palabras de su primera intervención «tienen un valor muy especial que ojalá todo el mundo en la Cámara haya entendido».

Rechaza subidas en el Impuesto de Sociedades

En su discurso, aseguró que la posibilidad de que el Gobierno restrinja las deducciones a las empresas en el Impuesto de Sociedades le parece un «tremendo error» y lo lógico sería bajar este tributo, aunque admitió que «este no es elemento». «No suban impuestos para recaudar más, tome medidas de impulso o de creación de empleo y crecimiento económico para gastar menos en paro e ingresar más por actividad económica», reclamó.

En este sentido, anunció que su formación aprovechará la tramitación de la reforma laboral para proponer modificaciones en la prestación por desempleo para vincular «más y mejor» con las políticas activas de empleo, vincularla a la aceptación de una oferta de trabajo.

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Asimismo, abogó por «repensar» si el modelo actual, así como las prestaciones relacionadas con el «campo en determinadas comunidades», en alusión al PER de Andalucía y Extremadura, que, a su juicio, provocan «desincentivación por el trabajo y abren bolsas de fraude» que incentivan la economía sumergida.

Test de estrés

En su réplica, Zapatero señaló que las críticas de Duran le parecen «humildemente, injustas» y aseguró que, aunque el parlamentario catalán no le reconozca ningún mérito, él si le valora su «capacidad de contribuir al objetivo común de salir de la crisis», más allá de las «circunstancias» y «eventos políticos» en el horizonte (en alusión a las próximas elecciones catalanas).

Zapatero pidió además a CiU un esfuerzo por «matizar» en su valoración sobre la economía española y aseguro que «afortunadamente» existen hechos que avalan que España y su Ejecutivo han trabajado y tienen la «confianza de otros» como país y como Gobierno. Asimismo, aseguró que las pruebas de estrés a la banca, que se publicarán el 23 de julio, serán un «momento clave» para despejar las incertidumbres.

Admite la quiebra del Pacto de Toledo

Asimismo, negó haber hecho recortes sociales --"le hago una enmienda de totalidad a sus planteamientos», aseguró-- y, como ejemplo, remarcó la apuesta del Gobierno por los derechos de los desempleados con la nueva prestación de desempleo de los 426 euros creada en agosto de 2009.

No obstante, señaló que la congelación de las pensiones era necesaria para reducir el déficit y, «aunque suponga una quiebra del Pacto de Toledo», van a tener un «impacto individual mínimo» en los pensionistas afectados.

En cualquier caso, Zapatero agradeció la voluntad de Duran para «trabajar» en todas las reformas y espera volver a lograr su «voluntad constructiva». «Esperamos que en las próximas semanas tenga un factor más para trasladar confianza en el Gobierno», aseguró Zapatero, quien, sin concretar a qué actuaciones se refería, prometió «trabajar» para ello.