El presidente de la CEOE, Juan Rosell, durante la presentación de su último ensayo. | Kote Rodrigo

TW
15

El presidente de la CEOE, Juan Rosell, se ha mostrado este martes partidario de suprimir o limitar el cobro de la prestación por desempleo a aquellos trabajadores que hayan recibido indemnizaciones por despido millonarias, que además están libres de impuestos.

Rosell ha hecho estas declaraciones, a título personal, durante la presentación de su libro 'Reformas o declive', que el dirigente de la CEOE ha dedicado a todos los empresarios: los que han caído en el empeño, los que siguen «al pie del cañón» y los que quieren serlo.

El presidente de la patronal ha puesto, a modo de ejemplo, que un señor que cobra 600.000 euros de indemnización de despido no paga IRPF porque está exento y luego tiene derecho además a cobrar hasta dos años de paro.

«Las bonificaciones en el IRPF -que suponen unos 300 millones de euros al año- deberían desaparecer y quien ha recibido una indemnización importante no debería tener el subsidio de paro. No se pueden tener dos ingresos por un mismo hecho», asegura en su libro.

Durante la presentación de su libro, que tiene forma de ensayo, Rosell ha señalado que el futuro de España pasa por las reformas para evitar «cierto declive», que la negociación colectiva es necesaria para impedir el «caos», y que los sindicatos tienen que modernizarse, al igual que están haciendo las patronales.

Ahondando en este último asunto, Rosell afirma en su libro que los sindicatos son «perfectos defensores de un 'status quo' en lo laboral que está archidemostrado que no funciona y que sólo es bueno para quienes tienen un empleo fijo y antiguo».

Preguntado por estas palabras, el dirigente empresarial ha señalado que se trata de una «crítica constructiva» que hace a los sindicatos, cuyos afiliados, dice, no son los trabajadores temporales, sino los empleados de las grandes empresas. «Todos nos debemos remodelar. Nosotros estamos en ello», ha añadido.

Para Rosell, cualquier organización que reciba dinero público, y eso incluye a sindicatos y empresarios, deben estar sometidos a una «transparencia absoluta», un «streep tease total», en el que se detalle lo que gastan sus dirigentes y qué se hace con el dinero público, porque el dinero público es «sagrado», según ha destacado el líder patronal.

«HAY QUE MEJORAR LA REFORMA LABORAL»

Rosell ha hecho mucho hincapié en que España necesita reformas y sobre la laboral, en vigor desde hace más de un año, ha indicado que «hay que mejorarla sin ninguna duda», porque «aunque se ha hecho buenamente lo que se podía hacer», está dando lugar a diversas interpretaciones en los tribunales.

Rosell ha indicado además que hay que seguir modernizando el mercado laboral porque hay mucha legislación en esta materia que está «obsoleta» y ha defendido la negociación colectiva porque con ella «se evita el caos».

Asimismo, ha afirmado que tras los esfuerzos de moderación salarial que están haciendo los trabajadores, cuando llegue la recuperación económica habría que ver si se puede ser «más generoso» en los salarios.

En otro orden de cosas, Rosell ha defendido una legislación «mucho más simple», que no se cambie cada mes o casa semana, porque la complejidad administrativa resta entre tres y cuatro puntos al PIB. Se ha mostrado partidario además de menos leyes, pero mejores, y de que haya menos políticos, pero con mejores sueldos, porque cree que, además de estar desprestigiados, están «mal pagados».

LAS AA.PP. DEBEN EVALUARSE

Respecto al factor de sostenibilidad de las pensiones, Rosell ha asegurado que la CEOE apoyará la reforma que proponga el Gobierno «por poco que vaya en la dirección correcta». «Seremos absolutamente responsables», ha declarado.

Eso sí, ha instado a evitar debates «demagógicos» sobre esta materia y ha dicho que «no se puede decir a todo que no» cuando los números de la Seguridad Social no son los que eran en 2011, año en la que se pactó la anterior reforma de pensiones.

Sobre la reforma de las administraciones públicas, una de las más necesarias para Rosell, el dirigente empresarial ha invitado a que se clarifiquen las competencias de cada administración y que, al igual que se hace en la empresa privada, se hagan evaluaciones sobre la eficacia de algunas medidas o programas. «Tendríamos que ir obligando a todas las administraciones públicas a decir qué están haciendo bien y qué mal», ha subrayado.

A la presentación de este ensayo, editado por Deusto, han asistido algunos miembros de la Junta Directiva de la CEOE, como los presidentes de la patronales de construcción y de Madrid, Juan Lazcano y Arturo Fernández, respectivamente.