Las palabras del «número uno» del PP, Miguel Arias Cañete, que dijo que no había querido alardear de su «superioridad intelectual» en el cara a cara con la candidata del PSOE, Elena Valenciano, para no parecer machista está marcando la campaña de las elecciones europeas.
El PP ha confiado la última parte de la campaña el tirón del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que centrará sus actos de esta semana en grandes plazas electorales: Sevilla, Valencia, Málaga y Madrid. Además, da por amortizado el asunto del supuesto machismo del candidato Miguel Arias Cañete.
La campaña del PP se ha visto afectada por factores no previstos. Primero, el asesinato de su líder en León, Isabel Carrasco, que provocó la suspensión de todos los actos electorales durante el lunes y el martes, ralentizando una campaña que no había tomado aún temperatura. Después, el 'patinazo' del candidato tras debatir con Elena Valenciano y sus palabras interpretadas como machistas.
Polémica superada
Fuentes 'populares' aseguran que esta polémica se da ya por superada y consideran que no está restando votos al PP, ni tampoco añadiéndoselos al PSOE, aunque admiten que sí ha servido para reforzar a los líderes socialistas y a Elena Valenciano entre los suyos. Añaden que el partido de Alfredo Pérez Rubalcaba procurará mantener viva la cuestión. Mientras, los socialdemócratas europeos están preparando una declaración de repulsa a las palabras de Arias Cañete. Fuentes socialistas han explicado que las declaraciones de Cañete han escandalizado en el seno de la socialdemocracia.
El candidato socialdemócrata a presidir la Comisión, el alemán Martin Schulz, ha escrito un mensaje de crítica a Cañete y de apoyo a Valenciano en su cuenta de Twitter, y prácticamente la totalidad de los candidatos socialistas europeos se han puesto en contacto con Ferraz para transmitir su respaldo.
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