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El portavoz del PP en el Congreso, Rafael Hernando, ha acusado este martes al presidente del Congreso, Patxi López, de actuar «al servicio» del líder socialista, Pedro Sánchez, y de saltarse «a la torera» las previsiones parlamentarias y constitucionales al fijar la fecha del debate de investidura.

En rueda de prensa en el Congreso tras la reunión de la junta de portavoces, Hernando ha arremetido contra el presidente del Congreso, que hoy ha adelantado la fecha del debate de investidura al día 1 de marzo tras haberla fijado el día 2 inicialmente.

A juicio de Hernando, López ha cometido un «gravísimo error» con esta decisión «arbitraria» para favorecer al «diputado Sánchez, incumpliendo lo establecido en el reglamento del Congreso.

Según ha explicado, con este cambio de fecha, el debate empezaría el 1 por la tarde, con lo que se limitaría en esta primera jornada a la intervención del candidato a la investidura, es decir, a un «monólogo» de Pedro Sánchez.

Ha advertido de que Pedro Sánchez «no es Felipe González» y no tiene por tanto 202 diputados como consiguió el PSOE con González en 1982, sino noventa, por lo que no debería utilizar la Cámara Baja como «un instrumento más de Ferraz».

Ha insistido además en que el pleno se debe reanudar 48 horas después de la primera votación y no «a partir de las 48 horas» como pretende López para que la votación se siga produciendo el sábado 5.

Hernando ha advertido asimismo que podría ocurrir que la votación del viernes se produjera « a las doce de la noche o la una de la madrugada».

Esto supone, ha señalado, «un verdadero disparate, y una utilización espúrea del reglamento de la Cámara» que supone además una «falta de respeto a los resultados electorales y al conjunto de los diputados».

Ha reprochado el portavoz popular que el socialista Antonio Hernando no haya acudido a la junta de portavoces por «vergüenza» y para no tener que defender esta posición.

El portavoz popular ha advertido de que analizará esta decisión y estudiará si se puede tomar «alguna medida de otra índole».

Y ha insistido en que Patxi López debe entender que las «cacicadas y los rodillos no pueden imponerse a la democracia».