Rivera asegura que Ciudadanos «acabará gobernando España»

En el discurso de clausura del congreso, celebrado en un teatro de Coslada (Madrid), Rivera ha agradecido el amplio apoyo conseguido y ha ofrecido «lealtad» a las ideas y al proyecto que se han definido para los próximos cuatro años.

«Vamos a cuidar esa confianza», porque «sé que lo que nos dais no es un cheque en blanco», ha manifestado. «Es un préstamo que vence a los cuatro años; y si lo hacemos mal, antes», y por eso «me voy a encargar personalmente de que esto funcione», ha asegurado.

Por su parte, el secretario general, José Manuel Villegas, ha resaltado que ahora Ciudadanos es un partido «mejor organizado», con una estrategia futura y con «una definición clara» de lo que son. «Hemos conseguido todo eso demostrando que la democracia es compatible con la eficacia y con la unión», ha afirmado.

Gobernar es cuestión de tiempo y esfuerzo

Rivera ha señalado que España puede convertirse en el octavo país europeo gobernado por una formación de centro y que alcanzar ese objetivo «es solo es cuestión de tiempo» y, sobre todo, «trabajo y esfuerzo».

«Queremos gobernar en 2019», ha afirmado en referencia a los gobiernos autonómicos y municipales, donde se celebran elecciones en 2019. Según ha explicado, lo que pretende Ciudadanos es adquirir experiencia en las instituciones para, en un futuro próximo, «no ya pedir cambios, sino hacerlos y liderarlos».

En relación con el ideario de la formación naranja, una de las pocas cuestiones en las que ha habido algo de oposición interna porque un sector de la militancia no quería eliminar el término «socialismo democrático», ha señalado que el debate ha sido «exquisito y democrático» y que salen «unidos» del congreso.

Liberalismo progresista

A su juicio, el documento se basa en los principios de igualdad, libertad y unión que Ciudadanos defiende desde que nació en Cataluña hace más de diez años y combina, desde «el centro político», los principios del liberalismo con los del progresismo. «Los liberales de Cádiz han vuelto», ha proclamado en referencia a la Constitución de 1812.

Tras indicar que uno debe «saber de dónde viene» y «no renegar nunca de sus orígenes», ha añadido que también hay que explicar a los españoles «qué vas a hacer cuando gobiernes». Cree que lo que se ha aprobado es «un ideario del siglo XXI» desde el cual aportar soluciones a «la mayoría de los españoles», especialmente a «la clase media trabajadora» y a los que «se han caído» a causa de la crisis económica.

Mientras Ciudadanos es una herramienta «útil» para los ciudadanos, otros partidos «están a la gresca», ha indicado, aprovechando para pedirles que «no perjudiquen la estabilidad del país» ni lo «bloqueen».

Respecto al papel de la formación naranja desde la oposición, ha afirmado que seguirán impulsando reformas junto a otros partidos pero también serán «firmes» cuando no estén de acuerdo con el Gobierno del PP.

Para acercar el proyecto 'naranja' a «cada rincón de España» y conocer los problemas de los ciudadanos, Rivera se dedicará a «patear» la calle. «Me propongo estar con un pie en el Parlamento» y con otro «en la sociedad civil», ha destacado.

Contra el nacionalismo y el populismo

Y en el ámbito europeo, ha apostado por «dar la batalla intelectual y política al nacionalismo y al populismo», oponiéndose a «levantar muros entre compatriotas» y a poner aranceles. En el mismo sentido, el líder del Grupo de la Alianza de Liberales y Demócratas por Europa, Guy Verhofstadt, ha advertido de que en la UE ya no hay un «círculo de amigos» sino un «anillo de fuego».

Verhofstadt, que ha defendido una «sociedad abierta» y el libre mercado en una Europa más unida, es uno de los invitados que han escuchado el discurso de Rivera.

También han estado Pablo Casado y Fernando Martínez Maillo en representación del PP y Ricardo Cortés por el PSOE, así como activistas de la oposición de Venezuela -como el padre de Leopoldo López-, Cuba y Guinea Ecuatorial, y organizaciones de la sociedad civil.