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La Dirección General de Tráfico (DGT) pretende que los conductores reduzcan la velocidad en 20 kilómetros por hora (km/h) respecto al máximo que permite la carretera a la hora de adelantar a ciclistas.

Así lo indicaba el director general de Tráfico, Pere Navarro, durante su intervención en la conferencia 'De la Seguridad Vial a la Movilidad Segura, Sostenible y Conectada', organizado por Executive Forum España, con la colaboración de Abertis Autopistas e Indra.
Navarro explicaba que su departamento trabaja en un real decreto para proteger a los usuarios que configuran el denominado colectivo de vulnerables (peatones, ciclistas y motoristas) y argumentaba que 2019 fue «el primer año en la historia» de España, en el que los usuarios vulnerables fallecidos en accidentes de tráfico superaron a los que viajaban en automóviles.

En este sentido, el director general de Tráfico confesaba que el propio ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, les instó a que se pusieran «las pilas» e hicieran «algo para hacer frente a este problema».

Según señaló el director de la DGT, hasta ahora los conductores debían mantener una distancia lateral mínima de 1,5 metros con el ciclista en el momento del adelantamiento.
«Nos gusta el mensaje: Usted ve las bicicletas. Primero, frene. Luego mire para comprobar los 1,5 metros y después adelante. Vamos a poner que la velocidad tiene que ser 20km/h por debajo del límite genérico de la carretera en la que vas a adelantar a los ciclistas», dijo.

Asimismo, explicó que, en esta revisión del reglamento de circulación con «criterios de protección de usuarios vulnerables», los denominados 'riders' tendrán que utilizar el casco obligatoriamente y las motos deberán usar los guantes y podrán circular por el arcén en momentos de congestión. Además, se promoverá el airbag en las motos.

Por último, afirmó que toda la normativa está hecha «en la época de automóvil» y el peatón es visto «como un obstáculo» para la circulación del vehículo, por lo que se va a rehacer la redacción para darle un carácter «más amable» con los desplazamientos a pie.