En su discurso ha puesto de relieve las potencialidades y capacidades de Cataluña, pero ha denunciado que el Govern pone una «camisa de fuerza» a muchos sectores, impidiendo su desarrollo: «Cataluña y su gente no falla, falla su gobierno». Al respecto, ha cargado contra la acción del Govern en cuestiones como la educación, la sanidad, las infraestructuras o la organización de las oposiciones para estabilizar funcionarios.
El líder del PSC ha mantenido su apuesta por tender la mano al Govern para llegar a «acuerdos de país», incluyendo los próximos presupuestos de 2024 o la negociación de un nuevo modelo de financiación, pero ha criticado que Aragonès ha decidido ir «solo». Asimismo, ha criticado la falta de autocrítica y autoexigencia del Govern: «Todo es culpa de los demás, como aquel estudiante que no estudia y dice que suspende porque el profesor le tiene manía». Illa ha terminado su discurso mandando un advertimiento al independentismo, al que ha pedido que no tenga «prisas» y «urgencias».
«No es momento de hacer carreras a ver quién llega antes, quién tiene más protagonismo y quién sale mejor en la foto. Es momento de pensar primero en el país, en la convivencia y en el país. Pocas fotos, las justas», ha señalado. «Me preocupan las urgencias y las prisas. No tiremos la casa por la ventana, que a lo mejor luego vienen nuevos inquilinos y algún mueble tenemos que dejar. Ni tomar un atajo, pensar primero en el país, ni tirar la casa por la ventana», ha agregado.
En su turno de réplica, Aragonès ha recalcado su propuesta de «un acuerdo que permita a la ciudadanía decidir su futuro» en un referéndum. «Yo aceptaré el resultado, lo que no sé es si usted está dispuesto a correr este riesgo», ha retado el mandatario catalán al líder de la oposición. Pero sobre todo ha incidido en la infrafinanciación de Cataluña, que afecta, ha denunciado, a su potencial. «El Estado actúa como opositor. Y el Gobierno debe dejar de vernos como enemigo en pactos como la investigación científica o la cooperación internacional.
«El Estado es un límite para el potencial de Cataluña». De hecho, ha lamentado que «el gran drama de España es que Cataluña solo avanza (en recursos y financiación) cuando los partidos que representan a la ciudadanía de Cataluña condicionan al Gobierno de turno», y como ejemplo de ello ha puesto los pactos del expresidente Jordi Pujol con Felipe González y José María Aznar, pero también otros posteriores a lo largo de las dos últimas décadas. «Imagínese qué autonomía tan débil», ha sugerido. »Desde esta España federal que usted defiende, ¿qué propuesta ha habido para Cataluña? Porque el Estado sí que ha ido a la reactiva permanentemente».
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Pero que esperaban de un grupo criminal con Junqueras y Puigdemont al mando ... Esto es el resultado de la democracia y los indultos de Sánchez...