En la comisión de investigación del Senado sobre las ramificaciones del caso Koldo, Alfonso Jiménez Palacios ha desgranado su labor al frente del INGESA, que se encargó de las compras de material sanitario durante la pandemia inferiores a 12 millones de euros. A preguntas de los grupos, el ex director del INGESA ha asegurado que no conocía a Koldo García, que da el nombre a la trama que está investigando esta comisión del Senado, y que le puso cara y nombre cuando se descubrió este caso a través de los medios de comunicación.
En este contexto, ha explicado que «nadie» del Ministerio de Sanidad le dijo que recibiese ni a Koldo García ni a ningún otro proveedor de material sanitario, sosteniendo que tampoco conoce a otros empresarios vinculados a la trama, como Víctor de Aldama o Íñigo Rotaeche. En cualquier caso, Alfonso Jiménez Palacios ha hablado también de la empresa Soluciones de Gestión, que está vinculada a esta trama, asegurando que «cumplía con todos los requisitos que se marcaban en los pliegos cuando salió la convocatoria».
«Se miraron exhaustivamente», ha declarado. Eso sí, ha señalado que le parece «miserable aprovecharse de esas circunstancias, aunque sea legal». «Ma parece absolutamente miserable lucrarse con esas cantidades tan exorbitadas, porque bueno, siempre se sabe que una empresa intermediaria determinada se lleve o se puede llevar una comisión, pero por lo que han publicado los medios de comunicación, que yo es la única información que tengo de todo esto, la verdad es que me parece miserable», ha agregado.
En cuanto a la centralización de compra de material sanitario, Alfonso Jiménez ha dicho que «nunca se llegó a prohibir» a las comunidades autónomas comprar nada: «La gestión era que íbamos a comprar de manera prioritaria» desde el Estado. Por último, y a preguntas del PP, ha reconocido que le es «muy difícil» hablar sobre la empresa FCS Select porque, según ha dicho, no participó «en ningún momento».
2 comentarios
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«cumplía todos los requisitos que se marcaban en los pliegos». Ésta es una prueba mas de la ciega estupidez de nuestros excesos normativos: Porque falta añadir que cumplía todos los requisitos…. Aunque es verdad que el precio máximo no estaba determinado, y además (por las circunstancias que fueran -incluida la proximidad-) era el único (o casi el único) capaz de proporcionar el material rápidamente.
Tenemos una administración llena de funcionarios tontos que no saben nada de nada..