De izquierda a derecha: Víctor Fernández, secretario de Acotur; José Tirado, Presidente de Acotur; Patricia Lliteras, gerente de la Asociación Hoteleros Platja de Palma; Biel Barceló, presidente de Ciutat de s'Arenal, y Jesús Sánchez, presidente de la Asociación Balear de Ocio Nocturno. | Morey

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Vecinos y hoteleros de la Platja de Palma, empresarios del ocio nocturno y comerciantes y empresas de servicios turísticos reclaman al Ajuntament de Palma la creación de la unidad de agentes dinamizadores cívicos que mejoren y mantengan la convivencia en la zona, unidades específicas de Policía Local para la Platja de Palma y que ésta se constituya como un distrito por sí mismo, dejando de formar parte del actual de distrito junto al Pla de Sant Jordi, con competencias y presupuestos necesarios para una gestión descentralizada.

Hoy por la mañana todas las entidades registraron en la oficina de atención al ciudadano de la Platja de Palma todas estas propuestas consensuadas encaminadas a combatir el problema del turismo incívico y de excesos que sufren «que no nos permite desarrollar todo el potencial como destino turístico de calidad», lamentó Biel Barceló, presidente de la agrupación ciudadana Ciutat de s'Arenal.

Barceló afirmó que «con estas propuestas queremos que el Ayuntamiento tome conciencia de que las soluciones para la Platja de Palma han de surgir de la propia playa, no surgirán de los despachos de Cort porque históricamente se ha demostrado que no salen».

En su opinión, con la aplicación de las Zonas Especiales De Intervención Turística (ZEIT) «se han observado pequeños cambios, sobre todo porque ha trascendido a países como Alemania, y hay un pequeño cambio de actitud por parte de algunos turistas». Pero aseguró que no es suficiente y que «los vecinos seguimos sin dormir y muchos turistas que buscan tranquilidad siguen diciendo en los hoteles y en los comercios que que si esto no cambia se pensarán seriamente no volver».

«Sigue sin haber policía suficiente»

La policía, añadió, «ha hecho lo que hace otras temporadas, que es hacer una serie de operaciones muy visibles, pero creo que el cambio es debido más a la presión que hemos realizado desde la Platja de Palma que a la policía, porque sigue sin haber policía suficiente».

Barceló consideró interesante que pudiera existir la figura de un delegado de Alcaldía en la zona «que tuviera la potestad suficiente para controlar los servicios específicos que reclamamos».

La gerente de la Asociación Hoteleros Platja de Palma, Patricia Lliteras, puso el énfasis en la necesidad de la regulación del 'todo incluido' «algo que ya hemos reclamado porque está claro que el problema del incivismo es el alcohol, dentro o fuera de los establecimientos». Todo eso, añadió, «debería ir acompañado con la regulación de los otros sectores, tipo souvenirs, comercios, locales de ocio, ... todos a una». Hizo referencia a que en la anterior legislatura se empezó a hablar con la Conselleria de Turisme «pero no se acabó de poner en marcha nada y suponemos que en próximas reuniones con el nuevo conseller de Turisme será un tema que trataremos desde la asociación».

Desde la Asociación Balear de Ocio Nocturno y Entretenimiento, su presidente Jesús Sánchez resaltó la importancia del compromiso de todos los actores para mejorar la Platja de Palma y que «no sea reconocida como una zona de excesos». A partir de ahí, dijo, «esperamos en el Ayuntamiento nos acompañe en esta estrategia de mejorar y posicionar de nuevo la Platja de Palma cómo se merece». Admitió que hay empresarios del ocio nocturno que no cumplen con las normas, «como en todos los colectivos económicos», y en este sentido dejó claro que «queremos que todo el mundo se adapte y los que no cumplen lo que ordena al Consistorio pues que cada vez se vean más ahogados y excluidos de la oferta que se puede ofrecer en esta zona».

Por su parte, el presidente de la Asociación de Comerciantes y Empresas de Servicios Turísticos de Mallorca (Acotur), José Tirado, insistió en la necesidad de la regulación del todo incluido. Recordó que en 2015, al inicio de la anterior legislatura, el Govern se comprometió a esta regulación del todo incluido «que aún no se ha realizado y tampoco lo han limitado». Aseveró que «ese es el gran problema de los excesos, el todo vale, y mientras no se ponga límite y control a esta oferta seguiremos teniendo los mismos problemas en las zonas turísticas como Platja de Palma y Magaluf y que es pan para hoy y hambre para mañana». Por eso retó y exigió al Govern a cumplir el compromiso de mayo de 2015.