Todo respira tranquilidad aunque la wiquipedia advierta de que «es uno de los barrios más peligrosos de España y no se recomienda entrar, a menos que vayas a comprar». José –«sí, me puedes identificar como José», precisa– lleva 15 años viviendo en Son Gotleu y desde hace dos días va a ayudar al propietario de una frutería. Se pone en la puerta para que se respeten los turnos y la gente no se acumule.
«Que pase esto pronto», afirma, mientras alguien que dice llamarse Antonio afirma que llevaba dos días en casa y que ahora ha salido a comprar algo y se vuelve. Ha oído por ahí que, alguien ha dicho, que «los chinos ya han encontrado la vacuna».
José dice que se oye de todo y que incluso esta mañana alguien había dicho que una mujer había dicho que un policía quería ponerle una multa por no llevar máscara. Eso es mentira pero en todas las conversaciones de estos días, mentira y realidad se entremezclan. En Son Gotleu y en todas partes. Según explica José, «ahora se ve gente que va y viene a comprar pero, por la noche, no hay nadie y hay un silencio que da gusto». Y remata: «esto parece una zona residencial».
La policía pregunta
Y es que el cierre de bares y de locales de juego parece haber suscitado un cambio en el día a día. Además de en la noche, que es a lo que se refería José, el encargado de que no entren a la vez más de tres personas.
Eso es algo que se cumple a rajatabla en otras tiendas abiertas. No hay mucha diferencia, o ninguna, con lo que está ocurriendo en eso momento en otras zonas de Palma.
Un coche camuflado de policía, con dos agentes dentro, ha pasado poco antes. Iba hacia la plaza de Miquel Dolç –que años atrás fue Teniente coronel Franco–, cruce de varias calles y con bancos para sentarse aunque, estos días no se puede. «No entiendo bien el español», responde un hombre que se ha sentado allí pero que se ha ido antes de que entre el coche policial. El coche camuflado se para ante donde estoy y, por primera vez desde que empezaron los días del estado de alarma, alguien pregunta qué hago yo en la calle. Es la hora de la primera de las careroladas pero el sonido metálico no se oye ni cerca ni lejos.
La actividad sigue, al ralentí como en cualquier otra zona de Palma, pero sigue. En una obra trabaja una persona que no lleva casco ni mascarilla. Pinta una pared. Es la hora del reparto de productos a algunas tiendas. A una que anuncia productos frescos, lo que llegan son decenas y decenas de bandejas y paquetes de plástico.
Los autobuses van y vienen medio vacíos. Hay mujeres y hombres que pasean perros, y mujeres y hombres que arrastran carritos. Una pareja lleva un carrito de bebé, aunque vacío.
También los perros son los protagonistas. E incluso se cruzan por la calle. El decreto que declaró el estado de alarma no alude a la imposibilidad de que los canes se toquen y huelan. Tampoco especifica las distancias a guardar ente ellos. Pero deberían saberlo quienes los sacan de paseo.
11 comentarios
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Creo que todavía no te has enterado de que va esto y se trata de no salir a la calle, por esa regla de tres que salga toda la familia junta a hacer la compra o a pasear el perro. Espero que la próxima vez te lo expliquen con una receta.
Tan simple como que hay que evitar el menor número de personas en calle para casos no justificados. Si sale a hacer la compra o pasear el perro toda la familia estamos arreglados.
yo paseaba con mi mujer el perro y una patrulla de la Policía me paro y me dijo que solo podia pasear el perro una persona y yo me pregunto y en mi casa tenemos que dormir se parados y.ver la televisión uno en cada habitación .porque si yo me contagió mi mujer no.se contagie no entiendo nada
En las zonas residenciales siempre hay algun vecino haciendo reformas...
Para algunas cosas, debería de durar para siempre el estado de alerta. Que gusto dormir por la noche y levantarse sin oír tráfico o ruidos.
Si algo positivo hay se nota la contaminación, la delincuencia, está más limpio y que haya orden y respeto hacía los demás.
@pep...correcto ....y lo que ha bajado la delincuencia,,,que gozada...volvemos a la Mallorca de los 60 o 70...
A ver si hay suerte, que seguramente no, y se vacía de gente la isla, eso sí sería tranquilidad. Sobra más de la mitad de la población y no me refiero a la gente que trabaja, cotiza y cumple las normas sino gente sin oficio ni beneficio, que trabaja en b y quienes pasan la temporada pegando palos atrayendo turismo delincuente. Si es cierto que el turismo es la principal fuente de riqueza por qué no se gestiona como es debido?, con la belleza que es Mallorca habría turistas que pagarían mucho por pasar sus vacaciones aquí, pero no como está montado ahora lógicamente.
Lo único positivo de este coronavirus , es la paz ,la tranquilidad y la serenidad que hay en Palma , es verdaderamente un lujo !!!Yo firmaría de por vida esta tranquilidad .
Esto es lo que pasa cuando la policia patrulla por el barrio y hace cumplir la ley. Vivo en el barrio desde siempre y a la policia solo viene cuando pasa algo realmente gordo. En el dia a dia, nunca vienen, ni a patrullar, ni cuando les llamas para algun problema. Y la gente hace lo que le da la gana, porque sabe que la policia no va a venir...