El cierre de las playas es habitual en Palma debido a los vertidos de las aguas mixtas cuando llueve. | Joan Torres

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El Consell de Govern ha autorizado en la reunión de este viernes destinar a Emaya 1,4 millones de euros para ejecutar el proyecto del nuevo colector que unirá la Estación de Impulsión (EI) número 2 con la nueva estación de La Ribera en la zona de la Playa de Palma, para reducir los vertidos a la Bahía.

La portavoz del Govern, Pilar Costa, ha destacado en la rueda de prensa posterior al Consell de Govern que esta dotación permitirá la renovación de parte de las infraestructuras de saneamiento de Palma, por lo que se podrán reducir los vertidos en la bahía de Palma y ha indicado que está financiada con cargo al canon de saneamiento.

Las estaciones de bombeo costeras concentran actualmente sus caudales en la EI situada en la calle Parcelas, desde la cual se impulsan las aguas residuales a la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) Palma-1 a través de una cañería.
Esta infraestructura, construida en los años 70, tiene una capacidad insuficiente, lo que produce que de forma ocasional se produzcan vertidos en el mar, sobre todo en época de lluvias.

Este proyecto, financiado por el canon de saneamiento, permitirá eliminar dos estaciones antiguas que han quedado obsoletas, y constituir así un colector que lleve las aguas residuales a la nueva