Hace un año y cinco meses que los propietarios del restaurante Mariana la del Jamón luchan para que Emaya cambie de ubicación los cinco contenedores de basura que instaló frente a la terraza de su establecimiento en la calle Jacint Verdaguer. El 3 de junio del año pasado, el Àrea de Qualitat Urbana de la empresa municipal respondió por un correo electrónico que los contenedores serían desplazados «próximamente». Pero aún esperan.
El fuerte hedor que desprenden los containers en verano se palpa nada más llegar al lugar, lo que ha suscitado las quejas de los usuarios del bar y de los dueños del negocio, que confiesan haber perdido dinero por la disminución de clientes. Los restauradores afirman también que sufrieron una plaga por la que tuvieron que cerrar durante una semana, y denuncian la presencia de moscas y otros insectos que habitan en los recipientes de basura, que desprenden un fuerte hedor.
Cronología
El 6 de marzo del año pasado, Aiying Chen, dueña del negocio junto a su marido, se personó en las oficinas de Emaya para denunciar la situación. Dos semanas después, la empresa municipal contestó que no podía mover los contenedores. Tres meses más tarde Aiying insistió y remitió otra misiva, aseverando que «con las altas temperaturas el problema se ha intensificado». A los tres días, el Área de Qualitat Urbana de Emaya respondió mediante un correo electrónico: «Estos contenedores serán desplazados próximamente al lugar que actualmente ocupa la parada de la EMT», le dijeron. Pero la situación no ha cambiado, hasta la fecha.
El 11 de enero de este año los propietarios del establecimiento enviaron un último correo electrónico en el que volvían a exponer el problema para solucionar la situación lo antes posible. En el mensaje, la pareja de origen chino adjuntó varias fotos en las que se mostraba la proximidad de los contenedores con la terraza del local, con basuras depositadas en el suelo.
Para intentar dar un giro a la situación y ejercer presión al Ajuntament, los dueños de Mariana la del Jamón reunieron un total de 71 firmas de amigos y clientes del restaurante.
Aiying Chen lleva unos 15 años en España y casi cuatro al frente del bar. «Ya no podemos más. Estamos hartos del olor que hacen los contenedores en la terraza. Sobre todo ahora, en verano. Con el sol es peor y el olor es insoportable», afirma.
La propietaria insiste en que «vienen moscas y es un problema porque se ponen encima de la comida. Con cada caña ponemos una tapa de embutido encima de pan; y si ponemos dos, mientras el cliente se come uno, las moscas ya se han puesto sobre el otro y el cliente no se lo quiere comer porque un insecto lo ha tocado. Hemos perdido clientes y dinero por culpa de esta situación, pero tenemos la suerte de que contamos con una clientela fija que no ha dejado de venir aunque huela mal. Algunos prefieren entrar al interior, donde no huele tanto. Espero que la situación cambie lo antes posible», pide Aiying a los responsables municipales.
20 comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
En GRANADA : IGUAL, IGUAL, IGUAL y encima de las aceras y dentro de los Carril bici. España ( políticos incluidos ) es diferente.
Mallorca...... ciudad estercolero ....la gente no era tan guarra hace 20 años...... ya sabeis por donde voy....llamadme lo que querias.....Pero hay una cantidad ingente de cerdos SIN EDUCACION,,,que nos ha convertido en un excremento de ciudad...Y los politicos de ahora y de antes,,TODOS son responsables.....
Este bar en un foco de problemas. Con ruidos todo el dia. Esto es solo un "follon" mas de los que montan
Ahora ya sabe la señora Chen el trato que dispensa la administración pública a los autónomos. Eso sí, seguro que la tasa de autónomos no se la han perdonado en este año y pico.
Como éramos pocos, pari* la abuela. Lo digo por la reciente aparición de un quinto contenedor, con el desdoblamiento entre "fems" y "rebuig", cuya necesidad no ha sido explicada.
Y el coronavirus?? Ah no , que el coronavirus no está en las basuras , son bacterias y virus hacinados en las basuras que da igual mientras no sea coronavirus
Una vez más se demuestra lo eficaz y eficiente de la iniciativa privada a la hora de mantener un negocio, y con dedicación y esfuerzo dar el servicio, frente a la falta de dedicación, falta de esfuerzo, falta de eficacia y falta de eficiencia de la Administración pública en prestar el servicio. Por otra parte Palma es un auténtico estercolero: excrementos y orines de perros, bolsas de basura, trastos y vehículos abandonados cualquier día en cualquier lugar, ratas y cucarachas, aceras en mal estado, parques y jardines abandonados y en pésimo estado, calles con poca iluminación. Emaya no pasa por las calles con los camiones de agua a presión limpiando.
JuanCCiertamente la ciudad se está degrandando a grandes pasos, pero aquí debería actuar la Administración. Primero con mega-sanciones a los infractores que sacan basura fuera de horario, que ensucian, que escupen, que no recogen sucidad de su perro... Pero también unas buenas brigadas de limpieza y no un pobre operario con una máquina de aire a presión tira colillas y papeles a la calzada, mientras otra maquinita que solo sirve para despertarte va recogiendo del asfalto lo que puede. En otros países cada brigada tiene su zona, cada operario "sus calles" y hay controles de calidad. Por tanto el propio operario "afea" las conductas incívicas de los habitantes...por eso hay ciudades limpias y ciudades de "como total el vecino hace tal...
José el "Anti-Españolisto"Lo has clavado. Tal cual lo explicas.
El problema es que en Mallorca hay mucho guarro, cantidad de gente que fuma y tira la colilla, el que come pipas y las tira al suelo, voy a ver la puesta de sol a la zona de las Malgrats, que es zona protegida, y dejo toda la basura... Esto solo se arregla a base de tocar la cartera, no poniendo más gente a limpiar. Como decía mi abuela, no es más limpio quien más limpia si no quien menos ensucia.