Las autoridades, en una foto de familia junto a los vehículos impulsados por hidrógeno verde. | Redacción Digital

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El futuro del transporte publico es sostenible y sin emisiones de CO2 y Palma ya está dando los primeros pasos hacia esta realidad. Este fue uno de los comentarios más escuchados ayer en la presentación de los tres primeros autobuses de hidrógeno verde que, a partir de la semana que viene, se incorporarán a la flota de la EMT.

El acto, celebrado en la plaza de Cort, estuvo presidido por la presidenta de Govern, Francina Armegol, quien destacó la apuesta «valiente» del Pacte, tanto en el Ejecutivo como en el Ajuntament, por la transición energética. En este sentido, habló de «revolución en materia de movilidad» recordando otros proyectos sostenibles como la electrificación del tren o la ampliación de la red ferroviaria y agradeció al Consistorio y a las empresas privadas colaboradoras «que hayan creído» en la transformación que para el municipio supone la incorporación de estos vehículos eléctricos.

La presidenta, igualmente, recordó que la quiebra Cemex, que se ha reconvertido y será la encargada de producir el hidrógeno para los autobuses, «se ha convertido en oportunidad». La gestión de la empresa, que anteriormente producía cemento y materiales de construcción, fue asumida por Acciona y Enagás, y tras su transformación, se ha convertido en la primera planta industrial de España en producir hidrógeno renovable. De hecho, según apuntó su responsable, Belén Linares, la EMT será el primer cliente de la instalación de Lloseta, enmarcada dentro del proyecto ‘Power to Green Hydrogen Mallorca', que ya ha empezado a producir moléculas de combustible para abastecer a los vehículos.

Por su parte el alcalde de Palma, José Hila, habló de la «transformación de la ciudad, que ya es una realidad». Asimismo, apuntó que el municipio es el segundo del territorio nacional, tras Barcelona , que ha apostado por esta energía limpia y recordó que, entre abril y junio, y dentro de su política de movilidad sostenible, llegarán a las Islas 12 autobuses eléctricos, que complementarán a los presentados ayer. El alcalde subrayó que está incorporación forma parte de las segunda fase de renovación de la flota de la EMT que ha incorporado, de manera progresiva 65 vehículos nuevos. «Una vez haya concluido esta fase, la empresa habrá renovado el 92 por ciento de su flota en las dos ultimas legislaturas», comentó.

El conseller de Transició Energètica, Juan Pedro Yllanes, abundo en esta idea y resaltó que, con la planta de Lloseta y la incorporación de vehículos «cero emisiones», Balears se pone «al frente del proceso de descarbonización de la movilidad». El vicepresident del Govern también destacó la colaboración entre las administraciones para conseguir una ciudad «con mucha mejor calidad del aire». En total, según se anunció en el acto, la Empresa Municipal de Transportes ha adquirido cinco autobuses de hidrógeno, los tres que se presentaron ayer, y dos más que llegarán en el mes de abril.

El coste de dicha operación, informaron, ha sido de 4,8 millones de euros, de los que 2,6 lo ha aportado el Govern a través del fondo de capitalidad, algo más de 1,1 millones corren a cuenta del IDAE, dependiente del Ministerio de Transición Ecológica, y uno más lo abona el Ajuntament de Palma.
Los vehículos han estado fabricados por la empresa Solaris en Polonia y, según destacaron después del acto, «tienen un diseño más amable para los usuarios, son más silenciosos y disponen de un sistema de frenada que permite recuperar energía y que las baterías se carguen en cada frenada».

El apunte

La planta de Cemex puede producir 330 toneladas de hidrógeno al año

La presidenta del consejo de ‘Power to Green Hydrogen Mallorca’, que gestiona la planta de Lloseta, Belén Linares, aseguró que la instalación tiene capacidad para producir 330 toneladas al año de hidrogeno verde. En este sentido destacó que está previsto que los cinco autobuses con los que contará la EMT consuman, en cada ejercicio, unas 80 toneladas de este material. Asimismo, la responsable de Cemex, apuntó que cada uno de los vehículos adquiridos necesita unos 30 kilos de hidrógeno al día para funcionar.