Los gatos de Son Reus buscan un nuevo hogar estas fiestas. | T. AYUGA

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La asociación Gestión Felina Palma ha denunciado el trato que reciben los gatos en el centro de Son Reus y ha advertido en un duro comunicado que se están cometiendo «delitos que serán puestos en manos del Seprona, la Fiscalía de Medio Ambiente y la Dirección General de Derechos de Animales si no recibimos soluciones a la máxima brevedad».

Durante el primer encuentro de la entidad con el nuevo equipo de la regiduría de Benestar Animal del Ajuntament de Palma se denunciaron hechos como «el manejo de gatos, que por defecto se realiza con lazo, instrumento solo indicado para perros grandes. Se han detectado varios casos de muerte por fractura de tráquea». La entidad también ha señalado que «no se realiza un registro de entrada de todos los gastos. Así que, aunque las jaulas ocultas ya no existen, siguen haciéndolos ‘desaparecer' sin que quede constancia de ello».

Desde Gestión Felina advierten que se está llevando a cabo el reiterado «incumplimiento de protocolos de entrada al centro. En especial el desparasitado, que ya ha provocado la muerte de muchos gatos. Tampoco se desparasitan a los felinos de la colonia, pudiendo provocar un problema de salud pública».

Incompatible

En cuanto a la esterilización de gatos por parte del centro de Son Reus, la asociación denuncia que «se realiza por parte de los operarios en su horario de trabajo, siendo incompatible con el de los voluntarios». Así, señalan en su comunicado que «algunos gatos regresan a las colonias aún anestesiados. Otros pasan 48 horas sobre sus propios orines y excrementos tras la cirugía. Todos se retornan a la colonia en horarios de máxima afluencia de tráfico y personas, poniendo en peligro sus vidas». Además, denuncian que «se están devolviendo gatos a las colonias equivocadas».

Gestión Felina también advierte en su comunicado que en cuanto al abandono de gatos por partr del centro de protección animal de Son Reus, «tenemos pruebas de que llevan meses haciéndolo. Primero en colonias legales y luego, cuando se les advirtió de ello, cambiaron a zonas alejadas sin acceso a agua y comida. También se está haciendo con gatos sociables y bebés». En su comunicado cargaron contra el Ajuntament de Palma, especialmente por «la falta de tratamiento de gatos enfermos. La mayoría mueren sin ser tratados en UVIS internas».