El propietario no quiere dar su nombre para garantizar su anonimato, pero es una persona muy conocida en El Molinar; todos los vecinos saben perfectamente que la citada casa es suya. Ahora ha decidido venderla porque ya no la utiliza tanto. El inmueble, de cuya venta se encarga Engel&Völkers Palma, tiene unos 1.330 metros cuadrados útiles, de los que unos 930 metros cuadrados son habitables. Cabe destacar que cuenta con dos terrazas: una de 400 metros cuadrados con vistas al mar e inspiración caribeña y otra con piscina de 20 metros, zona de barbacoa y bar. Ambas terrazas se comunican mediante «un exclusivo ascensor de vidrio de Schindler que funciona sin cuerdas de tracción». Además, tiene «un hermoso y exótico patio interior, salpicado de palmeras y plataneros y adornado con pintura de Luca Monzani», que dan luz a la vivienda.
La distribución está realizada en tres plantas. En la primera se encuentra el dormitorio principal, con dos baños en suite: uno equipado con una sauna y una gran bañera, y otro con un hammam. Además, tiene amplios armarios empotrados y dos «impactantes» vestidores. Cabe destacar que en esta planta también hay un «lujoso piso independiente» equipado con cocina, salón, dormitorio, dos baños y un vestidor.
En la segunda planta hay un «espectacular salón con cocina abierta y privilegiadas vistas», un aseo de invitados y un despacho. Por su parte, en la planta baja, además de una gran sala de fitness con jacuzzi, se ubica una segunda área de invitados, con tres habitaciones con baños en suite y cocina. La propiedad ofrece dos garajes dobles separados.
Antonio Rey, responsable zona Palma Beach de Engel&Völkers, subraya que es «una propiedad de ensueño, proyectada por relevantes arquitectos y artistas, que destaca por las calidades de construcción y los materiales utilizados». Además, informa que lleva un par de meses a la venta y ya han recibido numerosas solicitudes de información.
25 comentarios
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Quina decoració, més horrorosa impossible. Ja ho diuen que tenir doblers no dona tenir bon gust...
El chocolate del loro...
Hay que ser hortera. No pagaba 17 millones por semejante engendro aunque fuera Amancio Ortega.
Para poder pagar eso no se debe ser honrado.
Bunyol ForadatEn su comentario, generalizando culpas, se la ha olvidado que son mallorquines los que venden, porqué les pagan mucho más de lo que vale.
UsuarioEsa zona hace 50 años no la quería nadie. Las "casas de pescadores" estaban que se caían y era un estercolero. Hasta que vinieron los que tenían visión de futuro y ahí está el resultado...
Bunyol ForadatLa inmobiliaria sólo hace su trabajo, para eso está
sobrasadaEste se va, pero el que la va a comprar seguro que no es un limpia coches
Como tantas otras cosas en la vida. La sequía que padece Baleares, el.resto de España y los ciudadanos no depende de que llueva sino de los ceros que tengas en el banco o los billetes escondidos bajo el colchón. Aquí no padecen la escasez, hay de sobra para las saunas y la piscina de esta casita de chocolate Lindt.
Cock&RoiOjalá!!! No caerá esa breva!!!