La imagen del Port de Sóller variará muy poco este año, a pesar del
gran proyecto de ampliación de la antigua base naval. La Dirección
General de Costes i Ports, adscrita a la Conselleria de Medi
Ambient, prevé una inversión de 130 millones en el puerto, pero en
lo que se refiere a estrictamente obras sólo se realizará un gasto
de 25 millones de pesetas para instalar dos pantalanes flotantes en
el muelle.
Los pantalanes flotantes tendrán capacidad para unos 48 amarres,
que no conseguirán descongestionar la bahía en la temporada
estival. El resto de la partida prevista por la Conselleria de Medi
Ambient se destinará a la realización de proyectos y estudios. De
esta forma, se redactará el proyecto de acondicionamiento de las
instalaciones militares (jefatura-vivienda del comandante, cuartel
de Marina, nuevos talleres y camareta de suboficiales), según el
convenio suscrito con el Ministerio de Defensa al ceder a la
Comunitat Autònoma la gestión de la antigua estación naval.
De hecho, el traslado de las instalaciones portuarias fijas de
la base naval a su nueva ubicación se realizará en el plazo de un
año «a partir de que obren en poder del Govern balear los estudios
correspondientes».
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