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Los vecinos consideran que las licencias concedida por los ayuntamientos de Felanitx y de Santanyí son nulas al «haberse omitido la declaración de interés general que debe otorgar el Consell Insular de Mallorca y un estudio de impacto ambiental a la hora de otorgar la licencia a la compañía Gas y Electricidad (GESA)». Por este motivo, han interpuesto un contencioso administrativo ante el Tribunal Superior de Justicia de Baleares (TSJB).

Desde el bufete de abogados de Rafael Ortíz y Jaume Grimalt que representan al grupo de vecinos se explicó que «se debe tener en cuenta que el mismo Ajuntament de Santanyí acordó requerir a GESA para que paralizase las obras de instalación de la red de alta tensión y, por tanto, se acuerda la suspensión administrativa de la efectividad de la licencia de obras concedida por este Consistorio en 1996 a GESA».

Otro de los aspectos argumentados por los asesores legales de los vecinos es que la instalación de esta red ha creado una gran alarma social por el hecho de existir estudios donde se determina que los residentes en las proximidades pueden aumentar el riesgo de contraer enfermedades peligrosas como es el cáncer.

También se apunta que existe una amplia unanimidad entre los vecinos de la zona donde discurre la red de alta tensión de 66 kilovatios que es de Portocolom a Santanyí. En el escrito presentado ante el TSJB se explica que 739 residentes en la comarca han firmado en contra de la red que quiere instalar GESA.