El tráfico por el túnel de Sóller ha aumentado un ocho por ciento en el último año.

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Los accionistas del túnel de Sóller reunidos ayer en junta general ordinaria aprobaron el balance económico de 1998, así como la renovación de auditores. Eduard Tegido, gerente de la Compañía Concesionaria del Túnel de Sóller, explicó tras la reunión que la concesionaria «tiene un plan económico financiero que prevé resultados positivos a medio y largo plazo, que se va cumpliendo». No obstante, preciso que la «rentabilidad global del túnel es baja». Tegido apuntó que en los años de concesión que quedan (hasta el 2016) los ingresos del túnel serán para «el pago de gastos y poca cosa más. El túnel no es un buen negocio». De ahí que la concesionaria negocie compensaciones con la Administración autonómica. «Dentro de la búsqueda del equilibrio financiero se proponen diferentes fórmulas de compensación. Estas pueden ser económicas, por las obras realizadas por exigencia del Govern, la ampliación de los años de concesión o el peaje en la sombra, es decir, que el Govern se haga cargo de una parte de este peaje».

El gerente de la Compañía Concesionaria del Túnel de Sóller aseguró que, a pesar del contencioso interpuesto contra el Govern balear para exigir compensaciones, las negociaciones continúan. «El recurso pude retirarse en cualquier momento», dijo. Uno de los componentes que influye en la rentabilidad del túnel es el porcentaje de residentes y no residentes. «El caso de reducción de peaje a los vecinos de un municipio es atípico; normalmente se realizan descuentos por la frecuencia del uso del túnel», expuso el directivo de la concesionaria.

La compañía, según indicó Eduard Tegido, «ha detectado usuarios que utilizan fraudulentamente el descuento y ha instado al Govern a tomar medidas».
De momento, ya hay un informe del Govern favorable a las aspiraciones de la concesionaria, pero «en principio la solución ideal es que el Ajuntament de Sóller compruebe la residencia de los vecinos porque una cosa es empadronarse y otra residir». Tegido reconoció que «ha habido épocas en que las relaciones con el Ajuntament de Sóller han sido mejores que ahora, aunque últimamente el alcalde ha manifestado que está dispuesto a dar información para la renovación de las tarjetas».