Cuarenta jóvenes pisaron ayer la uva en Binissalem hasta conseguir
sacar el mosto que más tarde se convertirá en vino. Organizado por
la revista «Arrós amb Salseta» y con el patrocinio del Ajuntament,
el I Concurs de Trepitjar Raïm motivó la expectación en Binissalem.
El tiempo inseguro no impidió que la plaza se llenara de público
que quiso presenciar como, a la vieja usanza, los jóvenes pisaban
la uva para convertirla en vino.
El éxito de participación ya estaba previsto, porque pocos días
después de abrirse las inscripciones a los participantes ya
tuvieron que cerrarse las listas. Las bases del concurso admitían
sólo 10 grupos de participantes formado, cada uno de ellos, por
cuatro personas. En total, cuarenta participantes, por lo que
fueron muchos los que, este año, debieron conformarse en ser meros
espectadores. Un solo premio de 40.000 pesetas era lo que se
jugaban los concursantes y fue para el grupo de Margalida LLabrés,
que consiguió llenar el barril con 19 centímetros de mosto.
El concurso comenzó a las seis de la tarde, cada grupo de
participantes debía separarse por parejas y cada una de las parejas
tenía cinco minutos para pisar 25 kilogramos de uva. El líquido que
iba saliendo se depositaba en una jarra y de la jarra al barril que
cada uno de los grupos intentó llenar al máximo. Con este acto,
ayer se revivió en la plaza de l' Església un método que las
modernas máquinas han dejado atrás. Los jóvenes concursantes
pisaron ayer el vino durante cinco minutos y muchos de ellos, en el
último minuto, ya mostraban su cansancio.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.