MARIA VÀZQUEZ06/01/00 0:00
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El alcalde de Sóller, el nacionalista Joan Arbona, manifestó ayer no sentirse nada preocupado con la deuda que tiene contraída el Ajuntament de Sóller y que asciende a 1.000 millones de pesetas. Según indicó, el primer edil la deuda será amortizada en un periodo de 10 años. De hecho, el año pasado ya se pagaron 200 millones de pesetas. «Podemos ir pagando de forma holgada; además no somos el único ayuntamiento que tiene esta deuda», indicó. Joan Arbona aseguró que para este año hay previstos varios proyectos de gran envergadura para el municipio tales como la compra del polvorín de la Base Naval, en cuya adquisición ya se trabaja.

También se espera que se realice el proyecto de rehabilitación del Port de Sóller. En breve, se mantendrá una nueva reunión con el conseller de Turisme, Celestí Alomar, para agilizar los trabajos técnicos. El año pasado, el alcalde ya inició los contactos con Alomar para llevar a cabo importantes actuaciones en la zona costera del municipio, a la que se quiere sacar más partido. La próxima semana, además, está previsto un encuentro en Sóller con los técnicos de la Consellera de Medi Ambient para tratar el tema de Deixalles. La apertura del vial de San Jaime y de la prolongación de la calle Cetre son otros proyectos que se llevan a cabo.