La Societat de Caçadors de Sant Joan pidió en una rueda de prensa
celebrada el pasado jueves la dimisión de la directora general de
Agricultura, Margalida Estelrich, ya que consideran «muy grave y
peligrosa la propuesta efectuada por Estelrich de recurrir a
sistemas químicos "veneno" para combatir a los conejos».
Según Joan Rabassa, miembro fundador de la Societat de Caçadors,
esta medida no sólo afectaría a los conejos, sino también a otras
muchas especies de la fauna en general. La primera medida que han
adoptado ha sido hablar con el GOB y la asociación Voltor Negre, y
no descartan denunciarlo a la Unión Europea.
Los cazadores santjoaners explicaron que ellos han colaborado de
forma «plena y desinteresada» en el plan de choque para reducir la
cantidad de conejos de los campos de Sant Joan. En este sentido,
califican de «supuesta» la plaga de conejos, porque después de los
700 ejemplares capturados en el último mes la población de conejos
de Sant Joan es similar a la de otros pueblos, y afirman que desde
la Unió de Pagesos (UP) hay interés en que se siga hablando de
plaga «por razones político-económicas, ya que lo único que
persiguen es la subvención».
En referencia a esto, Joan Rabassa añade: «A nosotros nos es
igual que pidan subvención o no. También nos consideramos también
payeses, lo que no nos gusta es que nos ataquen y culpen». Para
demostrar su interés en matar conejos, los cazadores explicaron que
en septiembre se dirigieron al Govern pidiendo poder cazar con
hurón y durante todo el año, pero nadie les hizo caso.
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