El director general de Residus, Nicolau Barceló; la directora general d'Indústria, Francisca Vives, y el alcalde de Lloseta, Bernat Coll, visitaron ayer la fábrica cementera.

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Valenciana de Cementos ha lanzado una oferta al Govern de les Illes Balears para reutilizar parte de los residuos que se generan en las Islas como combustible y materia prima alternativa en la fabricación de cemento. El director de medio ambiente de la empresa Valenciana de Cementos, Javier Merle, lanzó ayer esta propuesta al director general de Residus del Govern, Nicolau Barceló, y a la directora general d'Indústria, Francisca Vives, en una visita oficial a la fábrica de cemento de Lloseta. La oferta satisface en un principio tanto a Barceló como a Vives, pero ambos coinciden en señalar que «todavía no se ha recibido una oferta específica».

Valenciana de Cementos propone reutilizar aceites de locomoción y náuticos, neumáticos, escorias de la incineradora, lodos secos de la depuradora, cenizas volantes de la central térmica de Son Reus y otros componentes no tóxicos de los residuos sólidos urbanos. Algunos de estos elementos como los aceites, los lodos o los neumáticos serían reutilizados como combustibles de sustitución mientras que otros como las cenizas servirían como aditivos en la fabricación de cementos especiales. Tanto la empresa como el Ejecutivo valorarán ahora si será necesario crear una planta de tratamiento de residuos para este fin o si por contra bastaría con desarrollar en la Isla el tratamiento primario para enviar una vez triturados los residuos a la Península. Valenciana de Cementos estudiará la viabilidad económica de cada una de estas posibilidades.