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La fundación que gestionará la hospedería del Castell d'Alaró iniciará en breve los trámites para realizar una serie de reformas urgentes en las zonas de obra nueva y sa Taverneta con tal de acondicionar una serie de habitaciones que garanticen el servicio de hospedería mientras se afronta la reforma total de las casas.

Ajuntament, Iglesia y Consell presentaron ayer el proyecto de restauración de la hospedería. Las casas más modernas serán acondicionadas para que puedan acoger cuatro habitaciones dormitorio con capacidad para 16 personas y dos baños. Sa Taverneta se destinará a prestar los servicios de bar y comedor. Según avanzaron ayer los miembros de la fundación, las obras no se iniciarán antes del mes de septiembre, fecha a partir de la que el Inem facilitaría los trabajadores. El Ajuntament y la iglesia se harán cargo de la financiación del material. Durante el tiempo que duren las obras los actuales posaderos continuarán trabajando en el castillo.

Por otra parte, el alcalde de Alaró, Josep Gomila, ha querido aclarar unas declaraciones publicadas ayer en este diario atribuidas a su persona, en las que se insinuaba que Gomila anteponía los intereses de partido a nivel insular a los intereses de los alaroners. «Quería decir todo lo contrario», explica el alcalde Josep Gomila.