Los viejos molinos de viento de la zona norte de Mallorca
recuperarán su aspecto original. La Mancomunitat del Nord firmó
ayer dos convenios de colaboración con las conselleries de
Agricultura y Medi Ambient, que aportarán 45 y 30 millones de
pesetas, respectivamente, para llevar a cabo las reformas.
El programa de rehabilitación de molinos de viento para extraer
agua nació en el año 1997 a iniciativa de la Mancomunitat del Nord,
que consiguió la financiación de la Unión Europea a través de un
programa Life, pero el proyecto había quedado bloqueado en busca de
otros recursos. Un centenar de propietarios de molinos se
adhirieron a esta iniciativa consistente en incentivar la
rehabilitación de molinos, no con fines estéticos como era
habitual, sino para poder extraer agua sirviéndose de la energía
del viento. El presupuesto global del proyecto es de 317 millones
de pesetas, de los que Europa aporta 62 millones y el resto son
cofinanciados por el Govern, el Consell, los ayuntamientos y la
Caixa Rural.
Cien de los quinientos molinos que pueblan la zona norte de
Mallorca, ubicados principalmente en las localidades de Muro, sa
Pobla y Alcúdia, optan a las ayudas europeas para la
rehabilitación. Los propietarios deberán abonar entre un 35 y un 45
por ciento del coste total de la reforma. La Mancomunitat negocia
ahora con el CIM la posibilidad de que el personal de Fodesma pueda
encargarse personalmente de algunas de las rehabilitaciones.
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