Seis jóvenes de Binissalem trabajan desde ayer en la catalogación
de las lápidas del cementerio viejo que será rehabilitado
próximamente para crear un museo lapidario. Los chicos trabajan por
turnos para catalogar las tumbas. Crearán una base de datos
informatizada, además de una muestra fotográfica para exponerla en
un futuro.
El Ajuntament ha iniciado un proyecto de reforma del antiguo
cementerio. La intervención incluye la rehabilitación de la capilla
y de la zona ajardinada. El presupuesto previsto para la
rehabilitación de la capilla ronda los 15 millones de pesetas.
Habrá que reconstruir la bóveda de manera fidedigna. En la zona
ajardinada se van a reconstruir las lápidas que actualmente están
derruidas y se acondicionará el jardín, de forma que se pueda
apreciar la antigua estructura del cementerio.
Los trabajos de rehabilitación correrán a cargo de una escuela
taller del INEM, con lo que el Ajuntament sólo tendrá que hacerse
cargo de los costes del material. Una vez que hayan concluido las
labores de catalogación y de reforma, está previsto realizar una
cata arqueológica para investigar la existencia de restos de la
antigua iglesia gótica de Santa Maria de Robines, documentada en
1248. En concejal de Patrimonio, Joan Lladó, explica que en la
capilla se ubicará un museo con los restos arqueológicos que se
encuentren. El cementerio contiene tumbas de los siglos XVIII y
XIX.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.