Con la proclamación de l'Hereva y la lectura del tradicional
pregón, Valldemossa comenzó ayer las Festes de la Beata 2000. La
cita fue a las 22 horas, pero antes la Banda de Música de Montuïri
se encargó de convocar a los vecinos de Valldemossa en la Plaça de
la Cartoixa. Un año más los valldemossins asistieron de forma
masiva a la proclamación de l'Hereva, este año encarnada por Maria
Pons Mas, quien estuvo acompañada por sus damas de honor Natalia
Margarita Morell, Yasmina Albertos, Maria Calafat, Mª Luisa y
Blanca López, Mª Magdalena Moyá Munar, Margalida Reynés y Claudia
Tomàs.
Tras el acto solemne, llegó la lectura del pregón. Este año el
honor de pronunciarlo corrió a cargo del presidente editor de
Ultima Hora , Pere A. Serra, quien en un emotivo
discurso hizo alusión a su relación personal con Valldemossa desde
su infancia. Pere A. Serra realizó un recorrido por la historia
artística de Valldemossa, pueblo que ha acogido e inspirado a
numerosos pintores. Tuvo una mención especial para Bartomeu Sureda
Miserol, grabador, pintor y «magnífico retratista», para quien
reivindicó el reconocimiento de Valldemossa como hijo ilustre.
Muchos de los pintores que citó tienen lugar destacado en el Museu
d'Art Modern i Contemporani, del que deseó que tenga la categoría
que se merece.
El alcalde de Valldemossa, Joan Muntaner y Rosa Estaràs,
regidora y diputada en el Congreso, acompañaron a Pere A. Serra,
que asistió al acto con su esposa Margarita Magraner. Numerosos
amigos estuvieron en los actos. Entre ellos se encontraba Nils
Burwitz, Bartomeu Poquet, Bru Morey, Joan Oliver 'Maneu', Jaume Mir
y miembros de Els Valldemossa.
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