El Consell de Mallorca y la Fundació Deixalles han decidido
retirar, a partir del 15 de septiembre, los contenedores de ropa
instalados en los «parques verdes» de los diferentes municipios de
la Isla. En una carta remitida a todos los ayuntamientos de
Mallorca, el organismo insular explica que «en la mayoría de los
municipios, estos contenedores son una fuente constante de
conflicto, motivado fundamentalmente por los saqueos de que son
objeto y por la posterior especulación con la ropa».
El Consell aclara en la misiva que los textiles no están
considerados como residuos urbanos, pero que la voluntad de este
organismo es la de poder aprovechar la ropa usada para el Tercer
Mundo, por ello, junto con la Fundació Deixalles, entidad que se
encarga de este servicio, han creado una infraestructura de
recogida de la ropa a través de parroquias y asociaciones de
vecinos. Desde 1994, año en que la Comissió de Medi Ambient del
Consell implantó la recogida selectiva de residuos, los vecinos de
los diferentes municipios de Mallorca podían depositar las ropas
usadas en unos contenedores específicos instalados en los
denominados «parques verdes». Los resultados de la recogida de ropa
en la Part Forana han sido excelentes. De hecho, en 1999 se
recogieron 361.453 kilos y este año, hasta el mes de abril, 113.777
kilos.
Sin embargo, según explica Miquel Angel Borrás, responsable de
Medi Ambient i Natura, este sistema de recogida de ropa ha sido un
foco de conflictos. Se producen constantes robos y, además, en
muchas ocasiones, las prendas no se depositan en el contenedor sino
que se tiran fuera. «Ante estos problemas hemos decidido buscar
otros lugares para depositar la ropa usada como son las parroquias
o asociaciones», indica Borrás.
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