Muchos jóvenes se mantuvieron al margen de los incidentes. Foto: M.M.H.

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JOSEP MARIA SASTRE Felanitx amaneció ayer con la resaca de las Festes de Sant Agustí 2000. Normalmente los comentarios entre los vecinos deberían referirse al éxito de los actos del programa de fiestas. Sin embargo, los felanitxers sólo hablaban ayer de los altercados sucedidos el pasado lunes entre agentes del cuerpo de seguridad de la Guardia Civil y componentes de la peña El Coso, que se saldaron con un detenido, el ex regidor de Coloms a la Sala Sebastià Cerdà.

Las opiniones eran enfrentadas. Algunos vecinos criticaban a los jóvenes de Felanitx y los calificaban de «alborotadores» e «instigadores», además de afirmar que «deshonran a nuestro municipio; por su culpa la imagen de Felanitx se ha visto ensuciada». Un grupo de gente mayor recordaba que «antes nos lo pasábamos bien sin romper nada». Por contra, había quien condenaba la actuación «contundente, desmesurada y fuera de lugar» de los agentes de la Guardia Civil. «Los jóvenes no habrían actuado de esta forma si la Benemérita no hubiera estado junto a ellos», explicaba un vecino.

Las reacciones de los dirigentes políticos del municipio son también dispares. Por una parte, el alcalde de Felanitx, Miquel Riera (PSOE), ha criticado la actitud de «ciertos» componentes de la peña El Coso que se dedicaron a dañar los vehículos. «Tenemos que hacer fiesta, pero no podemos perjudicar a la gente», explicó el alcalde. En referencia a los gritos, Riera señaló que «lo que más me preocupa es que la gente pueda pensar que Felanitx es un apéndice de la banda terrorista». Sin embargo, Riera apuntó que «puede ser que en alguna ocasión la Guardia Civil actúe con cierta contundencia».