La romería hacia el santuario de Consolació y las típicas coquetes
fueron los protagonistas indiscutibles de la fiesta del Pa i es
Peix que se celebra el cuarto domingo de Cuaresma en el municipio
de Sant Joan.
La fiesta del Quart Diumenge es la más antigua que se conoce en
la localidad y a través del «Llibre d'obreries», de 1642, se
constata que se paga una limosna para el sermón del cuarto domingo
de Cuaresma. La fiesta comenzó sobre las 10'00 horas de la mañana,
en que un grupo de fieles salió del pueblo de Sant Joan para
dirigirse en romería al santuario de Consolació. Allí se celebró
una misa solemne que este año fue oficiada por mossen Pere Llabrés,
actual presidente de la comisión de Arte y Patrimonio de la
Iglesia, acompañado por un grupo de sacerdotes que provienen de
distintas parroquias de la comarca.
El argumento de la homilía se centró en la tradición, las
fiestas y las raíces santjoaneres. Acabada la misa, los fieles
disfrutaron de las típicas coquetes, realizadas sólo con harina y
agua, donde figuran los cinco panes y dos peces a los que se
refiere el Evangelio.
Este año, una de las novedades que cabe señalar es que, después
de muchos años, la Verge de Consolació volvió a lucir un ramito de
flores realizado en plata y que ha sido donado por una familia de
Sant Joan.
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