Momentos antes de iniciarse el pleno del Ajuntament d'Alcúdia ayer
al mediodía fue retirada del orden del día la aprobación del
reglamento de uso del catalán. Aunque no hubo manifestaciones sobre
este tema por parte de los miembros del equipo de gobierno
(UM-PSOE), todo apunta a que una concejala socialista
castellanohablante se mostró reticente a la aprobación del texto,
lo que hizo que el alcalde nacionalista, Miquel Ferrer, retirase
este punto de la orden del día.
En concreto, el artículo del citado reglamento que provocó el
malestar es el que exige a todos los representantes del Consistorio
a usar el catalán en sus actuaciones y documentos públicos.
Durante el turno de ruegos y preguntas, el portavoz del PP,
Miquel Ramis, denunció lo que a su juicio son «muestras de
anticonstitucionalidad en algunos de los artículos que, en algunos
casos, van en contra de los derechos fundamentales de las
personas». El portavoz del PP se refería de esta forma a un punto
del texto que establece como requisito previo e indispensable una
prueba de conocimiento del catalán para cualquier puesto de trabajo
que se requiera en el Ajuntament.
Asimismo, Ramis mostró su malestar porque «el equipo de gobierno
no ha querido buscar el consenso para la aprobación de este
reglamento del catalán».
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