Todas las agrupaciones y grupos de presión que se sientan
implicados en el desarrollo o no del segundo polígono industrial de
Binissalem serán invitados a una reunión con los grupos políticos
con representación municipal (PSOE, PSM y PP) para dialogar y
tratar de llegar al máximo consenso sobre la conveniencia o no del
proyecto.
El alcalde, Miquel Nadal (PSOE), explicó: «Antes de decidir nada
sobre el futuro de la segunda fase del polígono tenemos previsto
sentarnos a dialogar con todos los grupos que se puedan sentir
implicados». Nadal hizo estas declaraciones a raíz del rechazo
total y absoluto manifestado por la agrupación ecologista Gadma a
la propuesta de ejecutar sólo una pequeña parte 50.000 m2 del total
de 220.000 m2 del segundo polígono. En este sentido, Gadma sólo
estaría dispuesta que se construyeran el mínimo de metros del
segundo polígono necesarios para poder construir el vial que
delimite el primer polígono.
Frente a estas declaraciones, el alcalde Nadal mantiene que «si
hay diálogo, se podrán acercar posturas y adoptar acuerdos que no
supongan que nadie tenga que renunciar totalmente a sus
principios». No obstante, recuerda que el Ajuntament no es ningún
grupo de presión sino una institución que debe de velar por los
intereses de todos y buscar el equilibrio.
Cómo se resuelve el ámbito del segundo polígono es uno de los
aspectos más peliagudos que debe resolver el Consistorio
binissalemer para poder llevar a cabo la aprobación inicial de la
normativa urbanística municipal, prevista para mediados de este mes
de noviembre. Nadal asegura que el debate que se mantiene en el
seno del Ajuntament y del equipo de gobierno (PSOE-PSM): «Se está
desarrollando con tranquilidad y todo parece indicar que podrá
haber acuerdos».
Cuatro propuestas para el segundo
polígono
El Ajuntament de Binissalem tiene sobre la mesa cuatro posibles
alternativas a tomar respecto a la polémica segunda fase del
polígono: la desclasificación definitiva, la ejecución del 100%, la
división en dos fases de construcción no paralela o la ejecución
tan sólo de una pequeña parte de esta segunda fase. Esta última
alternativa es, aparte de la primera, la única que el PSM, socio de
gobierno del PSOE y hasta el momento defensor absoluto de la
desclasificación del segundo polígono, no ha rechazado. Por su
parte, PSOE y PP todavía mantienen debates internos para llegar a
un acuerdo sobre la postura a defender frente al polémico polígono.
La construcción de sólo unos 50.000 metros cuadrados de la segunda
fase permitiría cerrar con un vial la primera fase del polígono y
ofrecer suelo industrial a precios asequibles a todas aquellas
empresas locales que actualmente operan en suelo rústico o urbano,
según fuentes municipales. No obstante, los ecologistas de Gadma
creen que «sacar a todas estas empresas del pueblo es lo que se
debería haber hecho con la primera fase, en lugar de
especular».
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.