La reforma prevista en la carretera entre Sineu y Sant Joan, que ha
provocado las protestas de vecinos y propietarios de parcelas
objeto de expropiación, forma parte de un proyecto del Consell de
Mallorca para la creación de un eje transversal, mediante la unión
de diversas vías entre Campos, Porreres, Montuïri, Sineu y sa
Pobla. Así explica el director insular de Carreteras, Gonzalo
Aguiar, la reforma del trazado entre Sineu y Sant Joan, considerada
«excesiva» y «una barbaridad» por parte de vecinos y del propio
alcalde de Sineu, Andreu Matas.
«Para la creación de una carretera de estas características, los
técnicos que redactan el proyecto siguen una serie de parámetros
para las dimensiones del vial y en lo que se refiere a la
eliminación de curvas pronunciadas, que los vecinos afectados
pueden considerar excesivos», asegura Aguiar, que defiende la
minuciosidad a la hora de elaborar el proyecto. El responsable de
Carreteras del Consell explica que al proyecto se le ha otorgado un
carácter de urgencia «para no eternizar los trámites y poder
ejecutarlo en los plazos previstos», aunque se mostró dispuesto a
aumentar el tiempo de exposición pública y presentación de
alegaciones «si los afectados realmente lo necesitan así».
Aguiar considera que, a pesar de que algunos vecinos califican
el proyecto de «atentado a la Naturaleza», el proyecto del Consell
provoca menor impacto ambiental «que si nos propusiésemos crear una
nueva carretera para unir estos municipios». «Ampliar los trazados
actuales y realizar una reforma adecuada al tránsito que soportan,
supondrá un menor consumo de territorio, que es una de las
prioridades en este tipo de actuaciones», sostiene Aguiar.
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