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Si los planes no se tuercen, el Parc Natural de la Serra de Llevant se convertirá en el segundo núcleo poblacional de milano real (Milvus milvus) cuyo hábitat ha quedado reducido prácticamente al término municipal de Bunyola, donde su esperanza de vida es muy baja a causa de los venenos colocados para matar gatos. De hecho, según explicó ayer el responsable del área de conservación del GOB, Toni Muñoz, de los ocho ejemplares de milano nacidos durante 2000, siete han muerto a causa del mismo veneno: una mezcla de dos sustancias (Aldicarb y Carbofura) que no se venden aleadas sino que «alguien» las distribuye de forma interesada con el objetivo de matar.

La consellera de Medi Ambient, Margalida Rosselló, visitó ayer los dos polluelos de la especie en la finca pública de Aubarca que fueron liberados por la noche. Con éstas ya son ocho los milanos reales existentes en el parque, donde se les proporciona comida hasta que son capaces de cazar.