El Ajuntament de Vilafranca tiene en marcha un ambicioso proyecto
de embellecimiento de las calles de Palma, la Plaça Major y la
Plaça de Tomeu Penya. Según el teniente alcalde y regidor de
urbanismo, Joan Bauçà, una de las intenciones es el fomento del
comercio de la zona. En este sentido, explicó que «para ello se
creará una avenida hasta las rotondas para atraer a los clientes,
ya que el comercio de la zona cuenta con una clientela
consolidada».
Este proyecto se ejecutará ante la puesta en marcha de la
variante de Vilafranca que sacará el tráfico del municipio. La
principal actuación se centrará en la mejora de la travesía de la
carretera de Palma, que pasa por el interior del núcleo urbano.
Esta remodelación consistirá en ensanchar las aceras con el objeto
de dejar sólo dos carriles de tres metros de ancho cada uno.
Bauçà explicó que se colocará un pavimento en las aceras como
piedra natural o adoquines y, además, se plantarán una serie de
árboles. Entre otras cosas, el regidor de Urbanismo afirmó que
también está previsto soterrar todo el cableado de las fachadas y
completar la red de pluviales. En las dos plazas se propone
suprimir las aceras para tener una plataforma a un solo nivel con
un pavimento de adoquines que posibilite la circulación rodada.
El arquitecto Mateu Carrió y el ingeniero Antonio Ramis han
elaborado el anteproyecto. El presupuesto de esta actuación
asciende a los 3'3 millones de euros. «El Ajuntament no puede hacer
frente a esta inversión. Ya hemos llamado a varias conselleries
para que se impliquen», comentó.
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