Una vista de los empleados de la fábrica, que ayer vivieron un día normal de trabajo. Foto: A.BASSA.

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La fábrica de perlas quedará en Manacor. Esto esta muy claro. De dinero no quieren hablar, de condiciones laborales tampoco, pero el grupo catalán que será nuevo propietario de Majórica ha asegurado su permanencia en Manacor. «Aquí es donde está y donde tiene que seguir estando». Así de tajante lo manifestaba ayer, Josep Sardà, portavoz del grupo liderado por el empresario Rafael Español i Navarro.

Aunque no está definido si mantendrán a todos los trabajadores o se harán recortes, Sardà comentó que se realizará un nuevo plan industrial para analizar la situación y regularizar las condiciones laborales. «Descartamos el nuevo plan de viabilidad que hicieron los actuales directivos, entre otras cosas porque las circunstancias no son en absoluto las mismas». Consciente de la importancia de la firma para Manacor y de la preocupación que existe entre la población, Sardà tuvo palabras de ánimo para los trabajadores: «Lo único que tienen que preocuparse ahora es de vender lo máximo».

Sardà tampoco quiso hablar de los resultados de la auditoría ni del endeudamiento de la empresa. Simplemente recalcó «los resultado son correctos». Respecto a los compradores, añadió que «en su momento saldrán simplemente decir que se trata de un grupo industrial». Las reuniones prosiguen entre el empresario Rafael Español y los accionistas de Majórica. Anteayer, la empresa reconocía el principio de acuerdo de la venta del 100% del capital y la conformidad del BSCH para el cambio accionarial. Es muy probable que antes de finalizar la semana el acuerdo definitivo se haya firmado.