TW
0

La sentencia del TSJB que obliga al Ajuntament d'Artà a restablecer la legalidad sobre el proyecto de la ampliación de una vivienda realizada en la Colònia de Sant Pere, en la que el juez entiende que en lugar de haberse realizado una ampliación se ha construido otro edificio que va unido con pérgolas de madera, ha supuesto para su propietario, Bartomeu Payeras, un enorme disgusto, ya que afirma que «la construcción se ajusta al proyecto por el que el Ajuntament d'Artà me concedió la licencia de obras ya que cumple con las Normas Subsidiarias del momento».

Según Payeras, «la edificación no atenta contra el medio ambiente ni contra el entorno y es la única de todas las que le rodean que tiene una sola planta, la única con el suelo de piedras, con un techo de troncos y cañas del torrente, además de estar construida con materiales y colores tradicionales».

El propietario de la vivienda asegura que «el proyecto aprobado consiste en dedicar la totalidad de la antigua edificación a un estudio de pintura y la ampliación proyectada a vivienda. La edificación actual ya está en un 80% dedicada a estudio y sólo habito en 30 m2, por tanto el objetivo no es crear dos viviendas sino un estudio y una casa conectados».

Payeras recuerda que el proyecto fue «aprobado por el Ajuntament y después impugnado por unos vecinos que después de pruebas y informes jurídicos favorables, la juez desestimó el recurso. Los denunciantes recurrieron la sentencia ante el TSJB basándose en afirmaciones falsas. Además el TSJB miente al decir que la pérgola no está detallada en el proyecto y que pudiera estar compuesta por pilares de madera». El afectado concluye: «Si los jueces se hubieran molestado en mirar los planos verían que la base y las columnas son de hormigón».