La indignación que viven cientos de padres y madres de Cala d'Or
ante el último accidente sucedido el pasado jueves en la carretera
de Calonge a Cala d'Or y que se saldó con tres heridos muy graves,
uno de ellos un niño de 8 años, se trasladó ayer a esta vía, que
resultó cortada al tráfico por unos cien padres. Los manifestantes
salieron con una pancarta de «PPeligro», exigiendo al Consell de
Mallorca y al Ajuntament de Santanyí que solucionen la peligrosidad
del acceso al campo de fútbol por la carretera de Cala d'Or, cruce
donde la visibilidad es muy escasa.
La manifestación, que cortó la carretera durante unas dos horas,
derivó en algunos incidentes y enfrentamientos entre manifestantes,
conductores y la Guardia Civil. El ambiente llegó a caldearse tanto
que algunos padres acorralaron a un turismo que intentaba atravesar
la barrera humana. Los manifestantes insultaron al conductor y la
Benemérita acudió en su defensa. A raíz del incidente, uno de los
guardias civiles que vigilaban la seguridad de manifestantes y
conductores, exigió la documentación al regidor del PSOE en el
Ajuntament de Santanyí, Jesús Núñez.
Los manifestantes que se concentraron a partir de las ocho de la
mañana lograron provocar retenciones importantes en la carretera de
Cala d'Or y amenazaron con nuevas movilizaciones. «Mañana a las
seis de la tarde volveremos a cortar la carretera hasta que haya un
compromiso de construir una rotonda justo en el acceso al campo de
fútbol», expresó Ramona Moridas. Por su parte, el regidor
socialista Núñez reiteró que «en octubre de 2000 el Ajuntament
aprobó una moción para exigir la construcción de la rotonda y
parece que el equipo de gobierno aún no ha dado ni un paso al
respecto».
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