El primer teniente de alcalde del Ajuntament de Calvià, Isidre
Cañellas, ha negado que el rechazo de UM al convenio urbanístico
del alcalde Carlos Delgado con la sociedad Habitat Golf Santa Ponça
propiedad de la familia Nigorra para la recepción de las
urbanizaciones Nova Santa Ponça y Santa Ponça Golf sea por motivos
políticos.
El líder local de UM ha desmentido las declaraciones públicas de
su socio de gobierno en el Ajuntament, el alcalde Carlos Delgado,
en relación a que el desmarque de los concejales nacionalistas
sería de índole político y no por cuestiones técnicas o
económicas.
El pasado martes, Cañellas comunicó al alcalde su desaprobación
al borrador del convenio. A pesar de ello, el día siguiente el
Ajuntament firmó con los Nigorra el documento que precisa de
ratificación por el pleno del consistorio y que por lo tanto deberá
ser votado en la sesión ordinaria que se celebrará el próximo
viernes por la mañana.
Cañellas reitera la voluntad de UM de recepcionar las
urbanizaciones para dar servicios municipales a los numerosos
vecinos afectados por el abandono desde hace años, por parte del
urbanizador, de los aproximadamente 40 km. de viales.
En este sentido, el responsable de UM manifiesta que si los
Nigorra arreglan por su cuenta los desperfectos que ellos mismos
reconocen, «nosotros no pondríamos ninguna pega y el Ajuntament
podría recibir inmediatamente la urbanización».
Según Cañellas, el convenio firmado entre el PP y Habitat Golf
Santa Ponça cuantifica en 1.920.720 euros los desperfectos en
viales, alumbrado público, red de alcantarillado... pero no incluye
distintas partidas tal como indica el informe del técnico municipal
adscrito al área de Vías y Obras.
En dicho informe, el ingeniero municipal señala que a la citada
cantidad, si el Ajuntament debe afrontar las obras de los
desperfectos, hay que añadirle el 6% en concepto de beneficio
industrial que le aplicaría la empresa, otro 13% en concepto de
gastos generales tal como establece la ley de contrataciones
públicas y a la cantidad resultante aplicarle el correspondiente
16% de IVA.
Para Cañellas está claro que el Ajuntament debe recibir tal como
establece la ley las urbanizaciones en buen estado y «que los
ciudadanos de Calvià no tienen que pagar con sus impuestos los
desperfectos de Nova Santa Ponça y Santa Ponça Golf». Otro de los
puntos que UM desaprueba del convenio es la forma de pago. Según el
edil nacionalista recibir un solar clasificado como turístico,
«cuyo valor en estos momentos es meramente especulativo» no
responde a las necesidades actuales de la hacienda municipal. «Lo
que hará falta para arreglar los deteriorados servicios de
infraestructura es dinero y no un terreno turístico que no
necesitamos y que puede costar venderlo. Que lo vendan ellos»,
añade Cañellas.
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