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El área de Urbanismo del Ajuntament d'Inca empezará a elaborar a partir del próximo año un Plan Especial de Reforma Interior (PERI) para el casco antiguo de la ciudad con el objetivo de frenar la degradación actual en varias de sus zonas y fomentar su reestructuración urbana y la rehabilitación de inmuebles.

Este planeamiento urbanístico en el que se empezará a trabajar a partir de enero o febrero, según ha explicado el teniente de alcalde Bartomeu Seguí, pondrá especial atención en los barrios de Sant Francesc y el Serralt de ses Monges, zonas emblemáticas de la ciudad que presentan en varias puntos un proceso acelerado de deterioro, debido principalmente a una vieja estructuración y al abandono de numerosos inmuebles y edificios, muchos de los cuales presentan ahora un estado de ruina.

«El objetivo del Plan Especial de Reforma Interior será plantear proyectos para la reestructuración de estas zonas, que incluyan el derribo de antiguos edificios para crear espacios abiertos, al mismo tiempo que marque unas líneas generales para mejorar los servicios, la construcción de nuevas edificaciones y la rehabilitación de viejos inmuebles», señala Seguí.

El espectacular aumento de las promociones inmobiliarias en Inca durante los últimos años ha provocado escasez de solares disponibles en el casco urbano para nuevos proyectos, por lo que las rehabilitaciones de antiguos edificios en el casco antiguo se convierte en una atractiva posibilidad para los promotores.

«En el último año hemos recibido entre 15 y 20 proyectos de rehabilitación y creemos que con el PERI se puede incentivar aún más a los particulares y transformar un espacio urbano que ahora se encuentra degradado», considera el responsable de Urbanismo, que además apunta a la construcción del nuevo mercado cubierto como un elemento más a tener en cuenta. «Estamos muy esperanzados con este proyecto en el sentido de que revitalizará por completo una zona estratégica del casco antiguo», afirma.