Para empezar, Delgado no asistió al comité ejecutivo regional
del PP. El president del Govern, Jaume Matas, excusó la ausencia
del Delgado asegurando que el alcalde debía presidir la entrega de
los premios Rei en Jaume.
Pero llegada la hora del acto cultural, a las 20.00 horas, en el
hotel Lindler en Bendinat, Carlos Delgado no se presentó. En esta
ocasión, fue la teniente de alcalde de Cultural, Tinita Hernández,
quien justificó el plante de Delgado aludiendo a súbitos problemas
de salud. La ceremonia finalmente fue presidida por el primer
teniente de alcalde, Isidre Cañellas; la directora general de
Cultura, Catalina Sureda, y la delegada de Cultura de la
localidad.
Fuentes próximas a Carlos Delgado, indicaron a este diario que
el alcalde calvianer no hará ninguna declaración hasta el lunes
tras la reunión del comité local del PP.
En principio, la decisión de la Ejecutiva popular debería dar
carpetazo a la crisis de Calvià, pero recientemente Carlos Delgado
afirmó de forma tajante que no tenía previsto destituir al
tránsfuga, Joan Thomàs. Así pues, qué pasará en Calvià todavía es
una incógnita.
Joan Thomàs, número 2 en las listas electorales de Unió
Mallorquina (UM) y regidor de Mantenimiento, Vía y Obras, Nuevas
Técnologías, Medio Ambiente y delegado de Calvià vila, desencadenó
el pasado 27 de julio una de las tormentas políticas más
importantes de los últimos años, no sólo a nivel local. Ese día,
anunciaba que abandonaba voluntariamente Unió Mallorquina y en
sesión plenaria daba su apoyo al PP para aprobar con los votos
necesarios la recepción de la urbanización Santa Ponça Nova
promovida por la familia Nigorra. UM había avanzado que no daría
soporte a su socio de gobierno al convenio urbanístico por
considerar insufiente la cantidad económica para arreglar las
deficiencias de la urbanización. El líder de UM en Calvià, Isidre
Cañellas, se quedó solo y votó en contra con la oposición.
La crisis transcendió la frontera de Calvià e, incluso, se llegó
a hablar de ruptura del pacto PP-UM en el Consell de Mallorca, si
bien es cierto que desde el principio, la cúpula del PP ha
insistido en que se mantendría el pacto con UM. Este partido, por
su parte, se ha mantenido cauto a la espera de acontecimientos.
Joan Thomàs, el protagonista de la tempestad, tampoco quiso ayer
hacer declaraciones y desenchufó el móvil. Estos días, Thomàs había
afirmado que confíaba en Delgado. Ayer, se rumoreó que podría haber
dimitido, pero no hubo manera de poder confirmar o desmentir esta
información.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.