La sesión plenaria celebrada ayer en el Ajuntament de Manacor
acordó por unanimidad pedir al Institut Social de la Marina la
cesión de parte del local de la Casa del Mar para ubicar el nuevo
PAC de Porto Cristo. La consecución de este hecho evitaría que la
Asociación de la Tercera Edad de Porto Cristo tuviese que abandonar
el actual local social que en un principio se había propuesto como
el futuro centro sanitario.
Ya hace tiempo que el Ajuntament de Manacor pidió al Institut
Social de la Marina (ISM) la cesión de este local, pero recibió un
no por respuesta. Ahora, ante el traspaso inminente de las
competencias de ISM a IB-Salut es cuando se haría posible el
acuerdo entre las instituciones. Se debe recordar que los miembros
de la tercera edad expresaron en su momento su oposición a tener
que abandonar su local social para tener que ubicar el futuro
centro sanitario del puerto.
El Consistorio también aprobó reiterar al Consell de Mallorca la
necesaria variante de Porto Cristo, que tantos quebraderos de
cabeza ocasiona los meses de verano provocando retenciones
kilométricas. ALM-UM, en la oposición, presentó una enmienda a la
moción instando a la institución insular a que «renuncie a la
autovía Inca-Manacor ante la nula necesidad en vistas a la
ejecución del desdoblamiento de la carretera Palma-Manacor».
Estas palabras provocaron las críticas de Margalida Capó (PSM).
«No entiendo como ahora decís que la autovía es innecesaria cuando
sois los que la habéis promovido. ¿Dónde estabáis cuando nosotros
nos oponíamos al proyecto? dijo Capó. Desde ALM-UM, Miquel Àngel
Grimalt, aclaró que «el Consell no tiene dinero y por tanto se debe
renunciar a algún proyecto como la autovía que sólo beneficia a
Inca».
Por otra parte, salió adelante la creación de una comisión que
velará para el consenso para el futuro proyecto de paseo peatonal
de s'Illot. La comisión estará formada por miembros de los partidos
políticos, técnicos, vecinos y la plataforma Roques sense
Ciment.
Se ratificó también el acuerdo de la Junta de Gobierno sobre la
adopción de un compromiso de no utilizar el inmueble donde se tiene
que construir en futuro centro de día, para otras finalidades.
Las vacas de Cala Varques también tuvieron su momento de gloria.
La concejal del PSOE, Júlia Román, recriminó que el alcalde Pastor
calificara la denuncia de Costas como «ridícula» a lo que el primer
edil contestó que «no somos nadie en la playa».
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