El Grup d'Amics en Defensa del Medi Ambient (Gadma) ha recogido las
quejas de los caballistas y excursionistas, que han visto como se
les impide el paso por el camino viejo de Lluc a Pollença ya que se
han colocado dos barreras con candado. Aunque los excursionistas
disponen de una pequeña escalera para pasar la barrera, los
ecologistas critican que «éste no es un buen paso para las personas
mayores o con algún problema de minusvalía».
El camino viejo de Lluc es una antigua vía pública de herradura
que forma parte de la Ruta de Pedra en Sec.
En este sentido, el portavoz de Gadma, Bernat Fiol, señaló ayer
que «quieren potenciar la raza de los caballos mallorquines y
resulta que los caminos para ellos están cerrados con llave y
piedras para que no puedan pasar». «Este es un problema que pasa en
muchos municipios, primero empiezan poniendo una piedra y después
colocan una barrera», añadió. Por su parte, Francisca Vives,
miembro de la Associació de Cavallistes en Defensa dels Camins i
Rutes públicas, reclamó a los ajuntament implicados que pongan una
solución.
Ayer el alcalde de Escorca, Antonio Gómez (PP), confirmó que «la
usufructuaria de la finca Muntanya (por donde pasa un tramo del
camino) ha realizado una serie de actos para impedir el paso». Este
caso ha sido denunciado y el alcalde informará a los responsables
que «se trata de una vía pública que tiene que quedar libre al
paso».
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