La producción de almendras se ha reducido este año entre un 20 y un
25 por ciento debido a la sequía y la producción en toneladas de
Mallorca se ha reducido hasta 3.000 una cantidad muy inferior a las
7.000 de las buenas añadas. Los productores de almendras y
algarrobas que representan a 4.000 de las 6.000 personas que
producen almendras que hay en Baleares y le comunicaron ayer esta
cifra a la consellera de Agricultura, Margalida Moner, en la visita
que hizo a la finca de Productores de Baleares de almendras y
algarrobas en Binissalem.
«Aunque la producción ha sido mala los precios han sido buenos y
la almendra con cáscara se ha pagado a un euro el kilo mientras que
el fruto ya pelado ha tenido un precio de venta de entre 4,69 y
4,93 euros en el mercado», explicó ayer el presidente de los
productores, Simó Bonet. Una de las dificultades actuales del
sector es la de encontrar mercado para toda la producción, que en
los últimos años ha aumentado.
«Desde hace 10 años tenemos 1.800 hectáreas más de almendros
sembradas que es ahora cuando comienzan a producir mayor cantidad.
Lo que intentamos es colocar el fruto en sectores como la
hostelería, la pastelería y los helados, de aquí para poder
conseguir mejores precios», añadió el gerente de los productores,
Eduardo Cerdà.
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