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GORI VICENS
Una multitud llenó a rebosar la plaza de toros de La Macarena. Las peñas taurinas, la esencia de la fiesta al menos en Felanitx, pusieron la nota de color en las gradas y animaron una tarde de toros espectacular y divertida como siempre. Unas doce peñas presenciaron la novillada entre gritos de «olé» y gritos de ánimo a los novilleros y también a los novillos, una práctica que aumenta la diversión y que es exclusiva también de la fiesta taurina felanitxera. Como siempre la peña más numerosa fue la decana El Coso. También estuvieron otras agrupaciones taurinas ya consolidadas en la fiesta como els Picadors, els Bous, s'Espaseta, Farragueras, la Tapa o s'Estocada, entre otras que llenaron la plaza de color con sus respectivas y exclusivas camisetas.

La banda de música de Felanitx saltó a la plaza y animó la tarde al ritmo de los pasos dobles. Pero los primeros en saltar al ruedo fueron los Cavallets y los cabezudos que ofrecieron sus tradicionales bailes a la multitud que asistió a la plaza para disfrutar del espectáculo y aplaudir y animar desde los tendidos. Como buenos expertos en el arte taurino, los peñistas no dudaron en abuchear o aplaudir las malas y buenas faenas y reclamar también más premios para los toreros cuando los consideraban escasos. El constante clima de este mes de agosto hizo que en La Macarena no se registrara el insoportable calor de años anteriores pero sin embargo los peñistas tuvieron que tirar de bebida abundante para saciar la sed y el calor que ellos mismos provocaban con sus cánticos, bailes y saltos.

La tarde noche de novillos dejo paso a correfocs, al castillo de fuegos artificiales y a la última verbena del Sant Agustí 2006. El Parc de la Torre volvía a ser escenario para la más sentida verbena de los felanitxers y felanitxeres, Tumbet de Solfa, la Orquestra Honey y el grupo local Horris Kamoi terminaron la fiesta 24 horas después de la resurrección de la Kika en las aguas cristalinas de la Font.