Las ferias también padecen la crisis

De este modo, en la feria del Pebre Bord de Felanitx, Rosario con un puesto de ropa interior señalaba que hace unos 25 años que se dedica a vender en la ferias y mercados. Dice que la crisis se ha notado mucho estos últimos meses. «Antes vendíamos más. Ahora no sacamos ni para la gasolina, ni para pagar el puesto». Francisca hace unos 18 años que acude al mercado semanal y a la feria de Felanitx, al igual que en otros pueblos de la isla. Considera que «la crisis se nota mucho», que es bastante fuerte. «La gente, ahora, compra lo justo. Antes, un día de feria, compraban por comprar, ahora no».

«La crisis se nota mucho. La gente no compra plantas más caras de 10 euros. Plantas de 15 euros hemos vendido poquísimas, sólo alguna. El año pasado vendimos mucho más. Hay que pensar que dentro de poco será Tots Sants; la gente solía comprar ahora (18 octubre) plantas que habrían florecido el primero de noviembre. Pero no ha sido así. Por otra parte hemos tenido que hacer saldos: plantas que vendíamos a 3 euros las hemos rebajado a 2», señalan Aina y José Miguel, floristas fireros en la primera Fira de Inca. Toni Abraham y su esposa, floristas de Binissalem señalan que «la crisis no se nota demasiado. Quizás sí que hemos vendido menos que el año pasado» pero su esposa interrumpe: «Sí que se nota la crisis, hemos vendido menos que el año pasado, sin duda».