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Jornada política con muchas declaraciones y pocas concreciones sobre el futuro en el consistorio de Llucmajor.
Por la mañana el PP presentó a Joan Jaume Mulet como su candidato a gobernar el municipio el resto de la legislatura «en minoría», oficializando la ruptura de su pacto de gobierno con ASI. Minutos después el líder de esa formación, Joaquín Rabasco, anunciaba que el voto de su concejal «está a disposición de todos esos partidos que dicen querer superar una pésima gestión política en el Ajuntament».

A mediodía el PSOE señalaba que un imputado en el 'caso Caballistas' -Jaume- no es «el sustituto más adecuado» para el dimisionario Lluc Tomás. Y el Bloc consideraba que «la ruptura con ASI llega demasiado tarde». Opiniones que se trasladarán al pleno de investidura del nuevo alcalde, que tendrá lugar el 10 de diciembre.

Unanimidad
En la conferencia de prensa de los 'populares', atendida por el presidente de su junta local, Gaspar Oliver, apenas se ofrecieron explicaciones sobre los motivos de la ruptura del pacto con ASI, salvo que la decisión había sido adoptada «tras opinión unánime, clara y contundente de los rectores locales del partido».

Ante la insistencia de los periodistas, Oliver señaló que se han sentido «engañados» por sus socios, que les «ocultaron» información de unos hechos «que conocimos en las sesiones del juicio celebrado en la Audiencia». Según Oliver, que hubo de hacer una pausa en su parlamento para evitar el sollozo, la decisión se tomó a la vista de las consecuencias para Lluc Tomàs tras la sentencia de instancia que le ha condenado por malversación de caudales públicos con los que se habrían alzado en su momento alzaron Joaquín Rabasco y María del Amor Aldao.

En realidad, y aunque no fue hecho público en la comparecencia del PP, la conmoción de Oliver estaba motivada por el ingreso hospitalario de Tomàs, a mediodía del jueves, aquejado por problemas de ansiedad y la consiguiente afectación cardiaca. Aunque su estado de salud no parece preocupante -según comunicó ayer a sus allegados-, el ex alcalde de Llucmajor sigue sometido a pruebas médicas.

Oliver también confirmó ayer que la primera opción del PP tras las pasadas elecciones municipales fue ofrecer a UM un pacto para la gobernación de Llucmajor, «sobre el que la cúpula de ese partido nos dijo primero que lo veía posible y luego que no era el momento, con lo que tuvimos que buscar otro voto para la mayoría».