C. Ruiz de Galarreta26/07/09 0:00
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Repartidos por varias carreteras de Isla, Mallorca cuenta con doce túneles, de los cuales sólo uno es de pago: el túnel de Sóller. En total, son 7.120 metros de pasos subterráneos construidos en diferentes épocas de la historia de Mallorca, pero sólo el de Sóller -3.000 metros, el 42 por ciento del total- se planteó hacerlo de peaje con descuento para los residentes del Valle (Sóller y Fornalutx). De hecho, es ésta la única carretera de cobro de las Islas. Con los años, va subiendo y si bien para los residentes aún es asequible, para los no residentes resulta caro.

En Mallorca, a lo largo de la historia, se han realizado importantes obras públicas en materia de túneles y sólo en una ocasión se decidió que fuera de peaje. Así, destaca la obra del primer túnel de la Isla: el Peñal Fumat, en Formentor, de 250 metros de longitud y que fue excavado en roca dura, a finales de los años 30. La obra fue proyectada atendiendo en gran parte a motivos militares y terminó en 1940.

Embalses

Años más tarde se emprendió la construcción de los túneles de los embalses: el de Monnàber (430 metros) y el de Gorg Blau (260). Las obras del primero comenzaron en 1958 bajo la dirección de Miquel Àngel Llauger y las del Gorg Blau, en 1960. En aquella época, destacan los libros de historia, la tasa de mortalidad media en obras subterráneas era de un fallecido por cada 300 metros de túnel en el territorio nacional.

Complicada fue también la constricción de los dos túneles de Gènova, construidos a una distancia entre los ejes de 25 metros. En el tiempo les suceden los túneles de Peguera: Son Vic (840 metros) y sa Coma (170). Se proyectaron en 1989 y en ningún momento surgió la idea de que fueran de pago. Después se construyó el túnel dels Vidriers, entre Son Servera y Capdepera. La idea de crear una concesión administrativa se plantea en 1988 para construir el túnel de Sóller. Se tardaron casi 10 años en construirse. La concesión era para 28 años y en 2006 se amplió en 5 años y medio más. Acabará en el año 2022. El precio de ir y volver por el túnel es de 8,90 euros (casi 1.500 de las antiguas pesetas).

Túneles posteriores, como el de Bendinat o el de sa Mola, en el Port de Sóller, han constituido obras de envergadura, sobre todo el segundo, de 1.300 metros. Incluso el revestimiento es mejor que el de Sóller, donde hay importantes goteras. Todos, excepto el de Sóller, fueron costeados por el Govern. El de sa Mola costó 21,5 millones de euros.