En esta edición uno de los protagonistas indiscutibles ha sido el 'hort a la seca'. Así labradores experimentados como Jaume Jaume han compartido con los asistentes los secretos de sembrar tomates de remallet y melones utilizando los recursos hídricos con los que contaban los abuelos del Pla de Mallorca: poca agua y mucho sol.
Cambio social
Desde la organización entienden la 'agroecología' «como una propuesta transformadora que tiene mucho que aportar a un necesario cambio social», explica Aina Maria Socies, una de las coordinadoras. Un cambio social que tiene como referentes a la cultura popular, la cultura pagesa y «las luchas en defensa del territorio y el medio ambiente».
De hecho, el programa de actividades de las jornadas contempla cada uno de los pilares sobre los que se sustenta la 'agroecología' practicada en Mallorca. Los participantes de las jornadas aprendieron ayer el ciclo del cultivo en secano. Preparar la tierra, sacar las semillas de los rábanos, preparar patatas para sembrarlas, las recetas para conseguir abonos naturales a partir de ortigas o los sistemas para conservar los tomates centran las prácticas agrícolas.
Pero la cultura popular también ha estado presente en Ruberts y Montuïri, talleres de 'ball de bot' y de juegos tradicionales han aportarán la nota lúdica a unas jornadas reivindicativas que buscan extender la práctica de la agricultura tradicional y respetuosa con el medio ambiente.
Además de prácticas agrícolas y juegos, durante el fin de semana también los expertos aportaron su visión en debates y conferencias. Los 'aubellons', los recursos hídricos del Pla de Mallorca o las desventajas agrícolas de los biocombustibles pusieron la nota académica a las jornadas.
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