Una veintena de edificios del centro de Manacor se encuentran en estado casi ruinoso, según ha denunciado la coalición PSM+Esquerra+Verds. Basta con dar un paseo por las calles de la Pau, Olesa, Convent, José López o por los barrios de Fartàritx o sa Torre para encontrar casas cuya estructura está en malas condiciones.
La mayoria de los edificios ruinosos se encuentran en la parte antigua de la ciudad y en los últimos tiempos se han producido varios derrumbes. El mes pasado, cayó un balcón en la calle Joan Lliteres y, en 2007, se derrumbaron tres plantas en un edificio de primera línea de Porto Cristo.
Ante los últimos incidentes ocurridos en Palma, tanto los partidos como la ciudadanía reclaman la redacción de una ordenanza de inspección de edificios en mal estado o con una antiguedad superior a los cincuenta años.
En las imágenes que ilustran esta información se encuentran algunos de los casos más peligrosos. En la calle Peral, al lado de la céntrica plaza de sa Bassa, se encuentra uno de los inmuebles con más posibilidades de provocar desprendimientos. Los pisos se encuentran en tan mal estado que se abortó una reforma del edificio. También cabe destacar el edificio municipal de Can Bauçà, que no se utiliza y está cubierto con una red desde hace meses.
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